En alta mar, de Ramón Alberto Mejía

Autor: Delfín Acevedo Restrepo
11 diciembre de 2019 - 12:00 AM

Hombres, mujeres y niños de distintas nacionalidades emprenden el viaje. Unos de negocios, otros de diversión y placer.

Medellín

Uno de los placeres que nos ofrece la vida es viajar por el mundo, anota el autor del libro, para aprender y recrearse a las maravillas. Diversidad de climas, culturas, idiomas, etnias.

Lujosamente impreso por Tipográfica Limitada de Medellín,- 2019 - acaba de aparecer el nuevo libro del historiador y contador público, Ramón Alberto Mejía Bohorquez, promotor cultural y social en el país. El libro narra la apasionante aventura que zarpa de Marbella – Cartagena- el 4 de abril, día nublado sin perspectivas de salir el sol. Un mar relativamenta tranquilo, donde los pasajeros marchan apresuradamente a ocupar los camarotes que se les han asignado.

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Hombres, mujeres y niños de distintas nacionalidades emprenden el viaje. Unos de negocios, otros de diversión y placer. Todos alegres en un encuentro de camaradería porque viajar es una aventura increible que brinda nuevas experiencias.

El barco está equipado con piscinas, juegos de toda clase para entretenimiento de los pasajeros. El mar tiene un misterio insondable de ensoñación por su profundidad inalcanzable. El capitán del navío Stivenson Smit, alto, fornido, de amplio bigote, barbudo y de piel colorada debido a los cambios experimentados por el clima, altas temperaturas o fríos intensos. Un hombre amante del mar, porque el mar embriaga, estremece y embruja nuestros pensamientos.

Al ir llegando a Nueva York, el principal puerto del mundo, el corazón palpita de alegría  al contemplar la estatua de la libertad. Diversiones y espectáculos para todos los gustos y placeres. Recorrer su bahía en barco, tomar fotografías y contemplar la cantidad de naves ancladas en el puerto.

Avanzar a los puertos de Lisboa y Londres para terminar en Estocolmo, puertos de primer orden en las rutas comerciales. “viajar es vivir, es conocer, es nacer de nuevo, es olvidar, es sentir palpitar el corazón de nuevas vivencias y ensoñaciones”

El agua, ese gran regalo de la naturaleza lo estamos destruyendo, la cantidad de desechos orgánicos la estan convirtiendo en basurero planetario. La tierra está gravemente enferma y pide a gritos que no la maltratemos más. Uno de los placeres que nos ofrece la vida es viajar por el mundo, anota el autor del libro,  para aprender y recrearse a las maravillas. Diversidad de climas, culturas, idiomas, etnias.

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Las excursiones en estos cruceros a todas partes del mundo son muy apetecidas por los viajeros. Las fantasías, los sueños y las ilusiones del viaje son inolvidables. Se ofrece la oportunidad de contemplar las esculturas en los museos que guardan el recuerdo de los antepasados lo mismo que las bibliotecas y libros que recogen los hechos sobresalientes ocurridos en la humanidad. Continuando en el crucero se avanza hasta Buenaventura, puerto de primer orden en el pacífico colombiano y puerto de entrada de importaciones para el centro y oriente del territorio nacional donde llegan barcos de todas las nacionalidades. Se conoce tambien como la perla del Pacífico. Entre sus paisajes marítimos se destacan el Cabo de Manglares, las islas del Gallo y la Barra del Morro. Su clima tropical es humedo.

Leamos este agradable relato para conocer todo el encanto que nos ofrece el mar.

 

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