Varias especialidades tienen los ciclistas en el pelotón. Unos tienen grandes habilidades para el terreno montañoso, otros son expertos en las pruebas contrarreloj y algunos otros manejan una velocidad superior a los demás. EL MUNDO explica el papel que cumplen estos últimos, los llamados sprinters o embaladores.
Cada uno de los ciclistas tiene ciertas habilidades que los hacen fuertes en un tipo de terreno específico. Dentro del pelotón hay corredores que su fortaleza está en el terreno de ascenso, en la montaña; como también los hay para las pruebas contra el reloj y algunos otros son especialistas en la velocidad, que son los llamados embaladores o sprinters, quienes definen las etapas en terreno plano con una llegada masiva.
Los trabajos de cada uno son diferentes y se hacen de acuerdo a las habilidades que tienen y su especialidad. EL MUNDO quiso hablar con los embaladores, los arriesgados hombres que se exponen en un grupo de varios ciclistas para disputar la victoria de una etapa, para que contaran cómo es su trabajo y preparación en una carrera y en sus entrenamientos.
El director deportivo del Manzana Postobón Team, Luis Fernando Saldarriaga, explicó las características de este tipo de ciclistas y detalló que “los sprinters son corredores muy diferentes, la característica de estos especialistas en los embalajes es que son corredores con muy buena masa muscular, son corredores que tienen fibras rápidas, es decir, que en su constitución fibrilar presentan una contracción y excitación del musculo más rápida que los demás corredores, eso es una constitución genética, pero también se puede trabajar por especialidad”.
Saldarriaga resaltó que “este tipo de corredores presentan un poco más de fuerza que la mayoría de los ciclistas y tienen mejor potencia, es decir tienen la combinación de fuerza y velocidad, esas son sus características desde el punto de vista físico. Desde lo técnico, son corredores que dominan muy bien la bicicleta, que son hábiles, presentan muy buena técnica para pararse en pedales y poder desarrollar las técnicas del demarraje, que es cuando empiezan el sprint, y la técnica del embalaje, además de la técnica que utilizan cuando vienen muy ajustados y tienen que tirar la bicicleta. Estos tres aspectos se trabajan y se hace por separado, porque en cualquier situación se puede dar un sprint”.
Además, el técnico de uno de los actuales embaladores estrella de Colombia, Sebastián Molano, detalló que tácticamente son “corredores que tienen una característica muy especial y es que deben estar bien ubicados; tienen que percibir la característica, el tren o el ritmo fuerte del tren que haya conformado en el momento; tienen que ser muy confiables, que el que confíe en el compañero que le levantará el sprint, el que lo lanzará; no desesperarse ni estar intranquilo, porque el que maneja el espacio es el lanzador; tienen que guardar mucha energía durante todo el recorrido y no hacer cambios de ritmo, porque al final es donde tienen que desarrollar la máxima capacidad; tienen que acoplarse demasiado al equipo; configurar lo que es espacio y tiempo, cuánto falta y qué tiempo falta para llegar allá; y tienen que tener una capacidad muy intuitiva, una capacidad de reacción que les permita cuando faltan 12 o 14 segundos por desarrollar sacar su máximo provecho”.
Todos los ciclistas tienen una función dentro de la carrera y cada uno es diferente al de los demás. Uno de los grandes velocistas del país, Weimar Roldán (Team Medellín), contó cuál es el papel que realiza un velocista en una etapa dispuesta para los embaladores en una carrera de ciclismo.
“El embalador del equipo es el que más se cuida durante la etapa, el que está tranquilo, al que le toca gastar lo menos que se pueda, para que al final de la etapa lo entregue todo. Faltando 10 kilómetros más o menos para la meta el equipo se organiza para uno y se hace el trabajo final, que es filarse a tope hasta faltando 500 o 400 metros, que es cuando uno hace el último esfuerzo para ganar la etapa en el embalaje”, detalló el antioqueño.
Weimar, quien en la edición 58 del Clásico RCN lidera la clasificación de las Metas Volantes, reconoció que “los embalajes son muy peligrosos, son de mucha adrenalina y por eso hay que cuidarse mucho. Es importante el trabajo del equipo, porque si uno va en bloque con el equipo te respetan más, ningún otro corredor se interpone, entonces hay menos roces y menos caídas. Es muy importante tener un buen equipo que haga el lanzamiento, para uno estar bien de fuerzas y tranquilo para el remate final”.
El también antioqueño Jaime Castañeda (Orgullo Paisa), otra de las estrellas de los remates masivos en el país, agregó que el trabajo en una etapa que se pronostica con definición al sprint “se comienza con el trabajo de los gregarios, que son quienes tratan de controlar la carrera, tratan de que no hayan fugas o si las hay que no sean muy peligrosas y que no tengan mucho tiempo de diferencia, para al final poder descontarles y llegar con el grupo compacto. Sobre el final hay unos compañeros que se encargan de llevarnos y lanzarnos lo mejor posible para nosotros poder disputar el embalaje y buscar la victoria de la etapa”.
Según Castañeda, lo más importante a la hora de disputar el embalaje es “estar muy bien ubicado, mirando qué pasa y cómo va la carrera para al final calcular la distancia que falta para el embalaje y avisarle al compañero lanzador que es hora y tratar de que te lleven lo más rápido posible. Cuando se tiene más experiencia se cuida de las caídas y se mide qué puede llegar a pasar, pero a la hora de disputar el sprint se olvida todo y lo único importante es tratar de ganar”.
Tanto los escaladores, contrarrelojeros como los velocistas tienen su trabajo específico de preparación y entrenamiento para fortalecer su especialidad.
El experimentado embalador Jairo Cano Salas (EPM) manifestó sobre la preparación que “inicialmente para el ciclismo colombiano es complicado, porque se tienen que complementar las dos cosas: hacer buena montaña sin dejar de hacer los trabajos de fuerza máxima, ir al velódromo a hacer tras moto y trabajar algo tan importante como es la resistencia en un terreno tan duro como el colombiano, porque después de una etapa difícil como por ejemplo un ascenso al Alto de Letras, La Línea o Minas, muchas veces al otro día hay una fracción de transición, donde puedes ir al sprint, entonces es obligatorio y necesariamente que cada velocista que corra en Colombia haga buena montaña para que tenga la resistencia y la capacidad de no estar muy desgastado al otro día para afrontar el sprint”.
Los trabajos que normalmente realizan en los entrenamientos o preparación son “los trabajos en la pista, que son fundamentales para un velocista, igual que el fortalecimiento. Todo esto se verá reflejado en la carretera, porque en una carrera se complementa la preparación con el trabajo de los compañeros y si se está bien preparado el trabajo que se haga tendrá buenos resultados”.
El corredor nariñense Óscar Quiroz (Strongman) hizo moñona en la segunda etapa del Clásico RCN, disputada este sábado entre Cali y Armenia sobre un recorrido de 181,7 kilómetros, en la que ganó la etapa y le arrebató el liderato a Miguel Ángel Rubiano (Coldeportes-Zenú-Sello Rojo).
En una jornada que tuvo una fuga de catorce corredores, que inició en el kilómetro 78 y terminó en el 116, los más de 160 corredores marcaron un fuerte ritmo, siendo la velocidad la gran protagonista.
Al final, el nacido en Ipiales, Nariño, llegó a los últimos metros con los sprinters y algunos favoritos, cruzando en primer lugar la línea de meta y asumiendo el liderato del Duelo de Titanes.
“Ganar la etapa y coger la camiseta de líder es muy satisfactorio, estoy muy agradecido con mi equipo, queríamos ganar la etapa y conseguirlo y además ser líder es un gran logro para mí, me siento muy contento y espero que día a día me sienta mejor y todo salga de la mejor manera”, expresó Quiroz al final de la jornada.
Este domingo la Carrera de la Camiseta Amarilla tendrá el primer sorbo de montaña con la disputa de la tercera etapa, que se correrá entre Calarcá y Anapoima, sobre un trazado de 200,8 kilómetros, en los cuales el pelotón tendrá que pasar por el exigente y mítico Alto de La Línea, el primer duelo de los escaladores y favoritos al título de la carrera, quienes, sin duda, serán los grandes protagonistas de la jornada dominical.
Clasificación etapa 2
1. Óscar Quiroz (Strogman) ----- 3h:54:18
2. Diego Ochoa (EPM) ----- m.t.
3. Juan Pablo Suárez (EPM) ----- m.t.
4. Juan Pablo Rendón (GW-Shimano) ----- m.t.
5. Óscar Sevilla (Team Medellín) ----- m.t.
6. Miguel Ángel Rubiano (Coldeportes-Zenú-Sello Rojo) ----- m.t.
7. Walter Pedraza (GW-Shimano) ----- m.t.
8. Óscar Pachón (Nectar) ----- m.t.
9. Juan José Carrero (Sundark Arawak) ----- m.t.
10. Fabio Duarte (Manzana Postobón) ----- m.t.
Clasificación general
1. Óscar Quiroz (Strogman) ----- 4h:30:28
2. Diego Ochoa (EPM) ----- a 02
3. Juan Pablo Suárez (EPM) ----- a 05
4. Miguel Ángel Rubiano (Coldeportes-Zenú-Sello Rojo) ----- a 06
5. Ómar Mendoza (Team Medellín) ----- a 07
6. Óscar Sevilla (Team Medellín) ----- m.t.
7. Carlos Julián Quintero (Orgullo Paisa) ----- a 08
8. Juan Pablo Rendón (GW-Shimano) ----- a 09
9. Óscar Pachón (Nectar) ----- m.t.
10. Fabio Duarte (Manzana Postobón) ----- m.t.