La presencia de estos tres intervinientes ya anunciados, y ojalá de otros más que puedan enriquecer la discusión sobre ese proyecto, ofrece la oportunidad de nuevas formas de participación y moderación de diálogos públicos sobre actividades económicas.
El inicio del proceso de licenciamiento ambiental a la mina de cobre Quebradona, proyecto de Anglo Gold Ashanti en Jericó, Antioquia, ha propiciado el interés de distintas organizaciones de Jericó, el Suroeste y el departamento de Antioquia, para ser terceros intervinientes en el análisis y discusión de los estudios ambientales presentados por la minera a la Agencia Nacional de Licencias Ambientales, entidad responsable de aprobar, o negar, la licencia ambiental.
Hasta el momento, y en orden cronológico de presentación de sus credenciales para tomar parte en este proceso de licenciamiento, se han inscrito como terceros intervinientes la Mesa Técnica del Suroeste, que fue admitida por la Anla el pasado mes de marzo; la organización Jericoanos con Visión, admitida a inicios del presente mes de julio, y ahora ha anunciado también su interés de aportar argumentos al proceso, la Fundación Proantioquia. Estas organizaciones que ya han hecho públicas sus visiones sobre el proyecto tienen ahora la inmensa responsabilidad de sustentar sus posiciones con criterios técnicos, a fin de enriquecer el conocimiento que la autoridad ambiental y la opinión pública tienen sobre el impacto ambiental del proyecto minero.
El marco legal sobre el que la Anla va a considerar los estudios presentados por Quebradona y las consideraciones de los intervinientes se concentra especialmente en los criterios de impacto ambiental-paisajístico y social, que ya han sido aplicados para conceder permisos a proyectos de gran impacto para el desarrollo, como Hidroituango o el proyecto Buriticá. No obstante tener esos criterios gran importancia, la autoridad nacional tiene la oportunidad de promover un análisis que reconozca cuán complejos son los componentes de la sostenibilidad, según la definición de la ONU en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y, en consecuencia, propicie análisis que consideren los impactos de una posible actividad minera en Jericó sobre los indicadores de calidad vida de la población, la calidad de los ecosistemas, el desarrollo del hábitat y, por supuesto, las actividades económicas presentes y futuras a desarrollarse en el suroeste del departamento.
En tanto moderadora del proceso de discusión pública sobre las pretensiones de Anglo Gold Ashanti para construir la mina en el lugar donde viene realizando exploración desde hace más de una década, la Anla tiene la responsabilidad de permitir la clara exposición de sus ideas a los intervinientes ya inscritos y aquellos que en el futuro mostraren interés por participar en esta trascendental discusión. Los participantes, a su vez, ofrecerán argumentos que enriquezcan las consideraciones sobre el impacto de esta operación minera, la industrialización y la llegada de regalías, así como nuevos impuestos, para el municipio de Jericó, el departamento de Antioquia y un país que se enfrenta al reto de resucitar su muy deprimida economía, lo que es deseable que realice a través de empresas formales, que pueden y deben cumplir sus obligaciones tributarias, laborales y sociales.
Vea: Freno a las consultas tendenciosas
La presencia de estos tres intervinientes ya anunciados, y ojalá de otros más que puedan enriquecer la discusión sobre ese proyecto, ofrece la oportunidad de nuevas formas de participación y moderación de diálogos públicos sobre actividades económicas que se instalan en un territorio determinado pero tienen amplio impacto regional y nacional. Si este proceso se desarrolla con rigor posibilitará que estos medios legales e institucionales, y no las ilegales consultas populares o planes de ordenamiento territorial que exceden las facultades municipales, sean los instrumentos para que las comunidades locales, departamentales y nacionales puedan analizar, discutir y, ojalá, consensuar, el desarrollo de proyectos económicos con control social, como son por ejemplo, los proyectos ejecutables en el marco del modelo de eco-minería que promueve la Secretaría de Minas de Antioquia y tuvo muy favorable acogida en la Convención de exploradores y desarrolladores mineros del Canadá.
Desde la Iniciativa Antioquia por la Minería Sostenible, FundaMundo y su periódico EL MUNDO, hemos acompañado el análisis sobre la situación de la actividad minera en el departamento de Antioquia, y sus perspectivas para el inmediato futuro, atendiendo principios de legalidad; formalización; sostenibilidad de las operaciones; pago y uso racional de impuestos y regalías, y concertación de las decisiones sobre la explotación de los recursos no renovables. Desde esa perspectiva, saludamos, vemos con interés y acompañaremos la discusión pública razonada sobre la licencia ambiental para Quebradona.