El 46% de los ecosistemas de Colombia está bajo amenaza, según un estudio difundido este jueves por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por su sigla en inglés).
“Cerca del 50% de los ecosistemas de Colombia está en un grado de amenaza, aproximadamente el 30% del aérea original de los ecosistemas terrestres exhibe muestras de transformación o actividad humana”, aseguró el director de conservación de WWF-Colombia, Luis Germán Naranjo, al dar a conocer el documento “Colombia Viva 2017”.
El número total de ecosistemas identificados fue 85, de los cuales 17 se encuentran en peligro, lo que equivale a 21%, y 20 están en estado crítico (25%).
Por otro lado, el informe alertó que especies de recursos terrestres sufren “sobreexplotación”, lo cual compromete la supervivencia de muchas de estas, como son los frailejones, las palmas, las salvias y las orquídeas, considerada la flor nacional.
El documento reveló que de las 1.853 especies de plantas evaluadas, unas 665, que equivalen al 36%, están amenazadas de extinción.
Otro ejemplo de sobreexplotación sucede con los recursos pesqueros marinos y de agua dulce, lo que causa un riesgo de extinción de estas especies.
Según el estudio, los peces son la especie de animales dulceacuícolas más amenazada y advierte que las cuencas de los ríos Magdalena, Orinoco y Amazonas muestran signos claros de una declinación alarmante de sus pesquerías.
En el caso de las aves, uno de los grupos con más ejemplares en Colombia, el 48% de las 125 especies analizadas se encuentra en estado vulnerable, el 40% en peligro y el 12% en peligro crítico.
El estudio recopiló investigaciones publicadas por entidades científicas del país, como los Libros rojos de especies amenazadas elaborados por el Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt.

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Además, WWF aborda en el documento las posibles problemáticas ambientales en el posconflicto, luego de que el Gobierno colombiano firmara en noviembre del año pasado un acuerdo de paz con las Farc.
Naranjo dijo que “la apuesta por la paz en el país” va a “proponer nuevas dificultades”, como cambios en los ecosistemas de regiones “que estuvieron marginadas del desarrollo convencional”.
En ese contexto, el experto señaló que el estudio propone buscar “un ordenamiento territorial más eficiente para el país y una gobernanza social más equitativa y justa”, así como “unos mercados y finanzas que respeten la base de recursos” nacionales.