Las editoriales universitarias no sólo publican investigaciones, tesis de maestrías o doctorados, colecciones netamente académicas o textos guías. Aunque tienen como misión publicar el conocimiento que se produce dentro de ellas, su carácter es también el de ser un banco de conocimiento en todos los campos, por eso entre sus publicaciones también cabe la literatura, el ensayo periodístico o la poesía, y, es de destacar, que no existe una baraja limitante para los autores, ellos no tiene que hacer necesariamente parte del claustro universitario o tener alguna relación con la misma, no, “en las editoriales de las instituciones de educación superior de Medellín también publicamos autores reconocidos de nuestra literatura, pero que no están necesariamente en el canon comercial sino que son escritores que avala el comité de publicaciones y se les saca el libro”, relató Claudia Ivonne Giraldo Gómez, directora de Editorial Eafit.

Si bien Victoria María Lagos, visitante a la Fiesta del Libro de Medellín, cuyo telón de su edición número 12 caerá esta tarde, reconoció que nunca ha comprado un libro de una editorial universitaria, también dijo que le genera curiosidad conocer qué publican, pues en su imaginario está el que “sólo hacen libros académicos”.

Su opinión contrasta con la de María Camila Vives, quien dijo que es una consumidora asidua de las publicaciones de las editoriales universitarias. Ella sabe que en el pabellón de estas siempre encuentra algo “interesante para leer y aprender” en Fiesta, y contó que sabe del imaginario popular de que estos fondos sólo publican “libros aburridos”, a lo que ella expresó: “basta con estar acá en medio de libros de muchas índoles, para borrar esa creencia en el instante”.

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Felipe Córdoba, miembro de la Asociación de Editoriales Universitarias de Colombia (Aseuc), consideró que esa percepción es fácil de desdibujar, “cuando recibimos visitantes en las ferias y observan la cantidad y variedad de títulos de interés, se van con otra mirada”, dijo.

La Aseuc agrupa a 70 instituciones en el país y trabaja por socializar que las editoriales universitarias publican títulos más profundos que otras de carácter comercial, lo que hace a estos libros “más pertinentes”, añadió.

Doris Aguirre, jefe encargada del Departamento de Publicación y asistente de la Editorial UdeA, contó que los fondos universitarios vienen haciendo títulos para un público cada vez “más general”. Será por eso que de unos años para acá los libros de las editoriales universitarias son más atractivos para cualquier lector, y las cifras de venta se han disparatado, es la pregunta que asalta.

En el caso de la Editorial UdeA, los ciudadanos pueden postular sus obras libremente para someterlas a evaluación del Comité Editorial. “Si bien la Universidad de Antioquia cuenta con una convocatoria abierta durante el año regular, es decir, una convocatoria que incluye todo tipo de géneros, de áreas y de publicaciones de textos, exceptuando los que no correspondan con el tipo de obra propias de una universidad, esa convocatoria la abrimos del 2 de febrero al último día de noviembre de cada año, y en ella recibimos todo tipo de propuestas”, relató la editora.

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Un lujo que se pueden dar las editoriales universitarias es la no preocupación por “convertirse en un fenómeno de ventas”. Aunque no son netamente auto-sostenibles sus publicaciones se venden, tanto así que muchos de sus libros se beben constantemente reeditar. 

Los directores de las editoriales universitarias locales coinciden en que hacen una apuesta por más que tener ‘best sellers’, publicar ‘long sellers’, hacen tirajes pequeños y en promedio están publicando de cincuenta a 65 títulos anuales. Los libros los compran los mismos estudiantes, los científicos, los docentes y, en una proporción que está en constante crecimiento, el público en general, expresó Amalia María Cano Castaño, directora del Fondo Editorial de la Universidad de Medellín.

Según las cifras de la Cámara Colombiana del Libro, en el año podrían estar circulando unas 3.634 publicaciones de las editoriales universitarias, lo que representaría un crecimiento del 20% más que el año pasado.

En Medellín, los fondos editoriales universitarios cuentan con distintos canales de distribución de sus publicaciones, algunos tienen una librería propia, como la de la Editorial UdeA, la cual funciona en el edificio de Extensión del Alma Máter. Adicionalmente, ellas manejan otro tipo de canales, como son la participación en los diferentes eventos de libros del país, y, por su puesto, Fiesta del Libro es una cita obligada; igualmente, son invitadas a ferias pequeñas y hacen eventos específicos para las unidades académicas de cada claustro.