Los resultados electorales o las secuelas que dejaron las urnas han producido en los días siguiente a los comicios del pasado 27 de octubre más tensiones, agites, reacciones, molestias y ecos, que el nerviosismo, el cansancio, la incertidumbre, los ataques y la guerra sucia que se vivió a largo de la extenuante campaña.

Todavía los ánimos andan muy caldeados, y obviamente, por los lados de los partidos, candidatos y los electores que fracasaron en esa intensa jornada democrática y las preocupaciones son el común denominador sobre el futuro político, al tiempo que el contraste se registra en las huestes que aún celebran el triunfo y se preparan desde ya para gobernar en municipios y departamentos.

Los norteamericanos en forma muy pragmática definen la política como “ganar elecciones” y hasta razón tendrán, porque las derrotas producen consecuencias muy profundas o negativas. Los votos son como los goles en el fútbol, dicen algunos, necesarios para ganar.

El hecho más lamentable tras las elecciones fue la reacción violenta registrada en el municipio de Nechí, que originó la destrucción de varios inmuebles públicos y el traslado de los escrutinios de la votación para alcalde y concejo a Caucasia. Igualmente las tensiones que se suscitaron en Tarazá, Cáceres, Turbo Arboletes y Angelópolis por la estrecha diferencia en votos entre los candidatos que se disputaron el poder en estas poblaciones antioqueñas.

En forma civilizada se dirimió la Alcaldía de Cáceres.

Afortunadamente los problemas de orden público derivados de los comicios se han venido superando, como fue el bonito gesto con que concluyó en Medellín la apretada disputa por la alcaldía de Cáceres, en el Bajo Cauca.

Los escrutinios de esa población, que fueron trasteados a Medellín, se desarrollaron en el Pabellón Amarillo del Centro de Convenciones y concluyeron en la tarde del pasado sábado con un abrazo civilizado entre los dos aspirantes al cargo de alcalde, el liberal Juan Carlos Rodríguez y Damiana María Monterrosa de Aico.

La Alcaldía de Cáceres se definió sólo por tres votos a favor del candidato liberal.

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Por tres curules del Concejo

Pero al mismo tiempo ese emblemático e internacional recinto ferial de Medellín, que conforma a Plaza Mayor, fue el escenario de una tensionante puja por tres curules del Concejo de Medellín, que involucra a las listas del Centro Democrático, el Partido Conservador y el Partido Liberal.

La competencia dentro de la plancha uribista se registra por la séptima curul que hoy ostenta como elegido Albert Corredor y que le disputa arduamente el ramista Julio Enrique González Villa, con una diferencia que la noche del domingo estaba en los 50 votos.

La otra confrontación electoral involucra a los conservadores Carlos Alberto Zuluaga y Lucas Cañas por la tercera curul para el Cabildo en ese partido. Aunque la diferencia del actual concejal es superior a los 1.000 votos, se sabe que Cañas dará la pelea por supuestas irregularidades en la votación de la ciudad que lo habría afectado.

Pero el caso más sonoro se presenta por la segunda curul del Partido Liberal entre la actual concejal Aura Marleny Arcila y el excabildante Carlos Mario Mejía Múnera, quien le respira en la nuca en los escrutinios.

La ventaja del conteo de mesa de unos 250 votos en la noche de las elecciones se ha disminuido tras los escrutinios a sólo 38 votos entre ambos liberales y el Florero de Llorente han sido los resultados del puesto de votación de la zona electoral 41 que operó en las instalaciones de la Universidad de Medellín, que es el único que resta por contabilizar en la ciudad, debido a las reclamaciones que se han elevado contra sus resultados.

Los escrutinios de Medellín se suspendieron en la tarde del pasado sábado y se reanudarán este miércoles 6 de noviembre, a las 9 a.m., pero ya en las instalaciones del Teatro Porfirio Barba Jacob de las Torres de Bomboná, en donde avanzan los escrutinios departamentales de Antioquia y que precisamente están pendientes de los datos de Medellín para proceder a consolidar toda la votación depositada en esta región. En la mañana de este martes se leía la votación correspondiente a los otros 124 municipios.

La Comisión Escrutadora Central de Medellín habilitó todo este martes 5 de noviembre para que las campañas inconformes con los resultados electorales de los escrutinios en la ciudad presenten las respectivas impugnaciones con base en lo dispuesto en las causales del Código Electoral.

El liberal Mejía Múnera anticipó que presentará reclamaciones contra los resultados del puesto de la U. de M. y también contra el consolidado de la ciudad, al tiempo que Lucas Cañas y Julio Enrique González también elevarán objeciones sobre los guarismos contabilizados para la conformación del Concejo de Medellín. Todos estos pasos son necesarios dar previamente, para agotar la vía administrativa, pensando en futuras demandas judiciales ante el Tribunal Administrativo de Antioquia y el Consejo de Estado.

Los escrutinios de Medellín permiten definir jurídicamente o ratificar la elección de Daniel Quintero como alcalde, dirimir las curules en disputa del Concejo y la conformación de las JAL de la ciudad. Entre tanto, los escrutinios departamentales certifican la elección de Aníbal Gaviria como gobernador de Antioquia y concretan los resultados de los 26 diputados antioqueños.

La Comisión General Escrutadora de Medellín, como también la de todos los municipios del resto del departamento, y la homóloga de Antioquia son las encargadas de declarar las respectivas elecciones de las autoridades políticas que estaban en juego el pasado 27 de octubre, paso fundamental para la aplicación de la nueva ley o Estatuto de la Oposición.

Del estreno de esta norma dependen dos situaciones políticas muy novedosas. Establecer quienes quedaron de segundos en votación para las gobernaciones y las alcaldías, en cuyo caso tendrán 24 horas tras la declaración de elección para notificar por escrito si aceptan o no ingresar a las asambleas departamentales y a los concejos municipales. Y definir en enero cuáles partidos se declararán de gobierno, en oposición o independientes en las Asambleas y Concejos y de esa forma armar las respectivas coaliciones, término que irá pasando de moda.

La pancarta de la discordia en el Centro Democrático.

La reveladora pancarta

Y mientras por las Torres de Bomboná se despejan las dudas electorales, todavía se escuchan los ecos de los comentarios que ha originado el pasacalle colocado en la Avenida El Poblado recriminando al alcalde Fico y a su candidato Santiago Gómez, como también a la senadora Paola Holguín y al concejal Simón Molina por supuestamente facilitar el triunfo de Daniel Quintero.

Esta pancarta es uno de los muchos elementos y comentarios que han venido aflorando sobre el profundo malestar y el ajuste de cuentas que se vive dentro del Centro Democrático de Antioquia por la segunda gran derrota que sufren para la Alcaldía de Medellín. Unos señalan a los otros buscando culpables, en una molesta situación que tendrá secuelas en el futuro político del partido del expresidente y senador Álvaro Uribe.

Son tenaces e impublicables las razones o motivos que han trascendido sobre el por qué al final no hubo en acuerdo entre el sector del alcalde Fico y el senador Uribe, para que sólo hubiera un candidato a la Alcaldía de Medellín entre Alfredo Ramos y Santiago Gómez, ante la fuerza electoral que fue adquiriendo el hoy alcalde electo, que ya muchos sabían podría ser un gran y peligroso rival, como a la postre ocurrió, lo que muchos uribistas en su triunfalismo no vieron.

Unas razones esgrimen del lado del alcalde saliente y otras del uribismo sobre el desacuerdo que los llevó a la dolorosa derrota, lo que ya comenzó a originar desconfianza política en el sancocho de vanidades que es el uribismo en Colombia.

Óscar Andrés Pérez recibió la credencial como alcalde de Bello.

Qué encontrarán en Bello

Entre tanto, por Bello ya le fue entregada la credencial como alcalde al ganador de las elecciones del domingo Óscar Andrés Pérez Muñoz, pero en sus filas se preguntan qué encontrará cuando asuman la alcaldía tras 25 años de dominio suarista. Hay mucho pesimismo por esta ciudad.

El desplome electoral de liberales y conservadores, partidos que ya tienen, cada uno, en Medellín menos de 70.000 votos, debe ser un asunto para una nota aparte, pero dejemos para otro día este caso, para decir que el diputado y seguro aspirante al Congreso en el 2022, Norman Correa, hoy afectado por los daños que el invierno ocasionó en Jericó, aportó un dato muy interesante para los analistas de las intimidades electorales.

Y es que en el caso de la elección de la Asamblea de Antioquia, los candidatos que ocuparon el primer lugar en sus respectivas lista, con el # 51 en el tarjetón, fueron casi todos los más votados, como dando a entender que el elector marca allí la equis para salir rápido de esa elección.