Sobre ella recae el mérito de ser la primera, y, hasta el momento, la única mujer que ha presidido los destinos de esta Institución, en sus ya casi 116 años de fundación; el 5 de febrero de 2019, fue exaltada a Presidente Honoraria, cargo vitalicio que pocos Académicos han ostentado: ella es la décima persona ungida con esta dignidad.
La Academia Antioqueña de Historia nació el 3 de diciembre de 1903. Ese día, en la residencia de don Manuel Uribe Ángel, al finalizar su primera sesión, se firmó el acta de fundación. Así pues, nuestra Academia cumplirá el próximo 3 de diciembre de este año de 2019, ciento dieciséis años de fundación. Desde ese momento feliz al día de hoy, ha tenido en su seno a 441 académicos, hombres y mujeres que han puesto su magín, su intelecto, su tiempo, su trabajo y su amor por la historia, al servicio de Antioquia y Colombia. Y entre ellos, dos académicos, doña Socorro Inés Restrepo Restrepo y don José María Bravo Betancur, que siguen dejando (porque están activos) una huella profunda en la sociedad, y en los académicos que todavía gozamos la dicha de sus saberes, don de gentes y logros gremiales.
En plena consonancia con lo dicho, en la mañana del lunes 23 de septiembre de 2019, en el salón Consejo de Gobierno, de la Gobernación de Antioquia, el mandatario de los antioqueños, doctor Luis Pérez Gutiérrez, hizo entrega, a los académicos citados, de la Estrella de Oro de la Cultura de Antioquia, en reconocimiento a dos vidas dedicadas al trabajo gremial y al cultivo de la grandeza de Antioquia, todo ello desde el seno de nuestra Academia.
Con argumentos similares, sumados al principio ético de la gratitud, el pasado 26 de septiembre de 2019, la Academia Antioqueña de Historia, en su histórico Auditorio Manuel Uribe Ángel, hizo un sentido y merecido reconocimiento en vida, a nuestros dos citados académicos. Subsiguiente a las palabras de saludo del doctor Orestes Zuluaga Salazar, presidente de la Academia, tomó la palabra don Orlando Montoya Moreno, miembro de Número, quien, en 14 cuartillas iluminadas de admiración, historia y logros, expresó que “honrar en vida a dos imprescindibles, no es capricho de una Junta Directiva ni de los corporados; es honor, en justicia; es homenaje merecido por sus elevados servicios a la Academia y por cuanto les correspondió ejercer la presidencia en tiempos difíciles, sin cuyo timonel la suerte presagiaba angustiosos desenlaces”. Para finalizar dicho reconocimiento, fueron descubiertos sus retratos en óleo, que ahora son activos de la histórica pinacoteca de la Academia.
Con toda la consideración que guardo por don José María Bravo Betancur (a quien dedicaremos espacio en otra ocasión), centraré mi reconocimiento en doña Socorro Inés Restrepo Restrepo, empezando por decir que nació en el hogar del eminente médico, el doctor José Miguel Restrepo Restrepo y doña Ramona Restrepo Mesa, hogar conformado adicionalmente por sus hermanos Marta María, Juan Guillermo, Álvaro, Berta Lucía y María Victoria. Ingresó a la Academia Antioqueña de Historia como Miembro Correspondiente, el 13 de abril de 1993, convirtiéndose en la octava mujer en hacer parte de esta Institución. El 9 de abril de 1996, por la fuerza de su labor académica, fue promovida a Miembro de Número, convirtiéndose así, para la fecha, en la quinta mujer en ostentar tal categoría, y ocupar el sillón 25, cuyo primer titular fue el sabio sonsoneño Joaquín Antonio Uribe, célebre botánico, naturalista y educador, cuyo nombre honra al Jardín Botánico de la ciudad.
Doña Socorro Inés sirvió a esta Academia como Secretaria General por espacio de dos lustros, entre los años 2000 al 2005 y 2007 al 2011, al lado de cinco connotados presidentes: Gabriel Poveda Ramos, José María Bravo Betancur (en sus dos primeros períodos), Raúl Aguilar Rodas, Luis Javier Villegas Botero y Rafael Iván Toro Gutiérrez. El primero de julio de 2014, fue elegida presidente de la Academia, y reelegida para el siguiente periodo de 2015 al 2017. Sobre ella recae el mérito de ser la primera, y hasta el momento, la única mujer que ha presidido los destinos de esta Institución, en sus ya casi 116 años de fundación; el 5 de febrero de 2019, fue exaltada a presidente honoraria, cargo vitalicio que pocos académicos han ostentado: ella es la décima persona ungida con esta dignidad.
Para hablar de sus libros, artículos, publicaciones y ponencias, se requiere un espacio especial (que esta columna no permite), pues doña Socorro Inés ha sabido rutilar en toda cuanta estancia ha tocado su vida. Con la venia de don Orestes Zuluaga Salazar y nuestra Junta directiva, sólo quiero agregar como antioqueño, como académico y como amigo, que doña Socorro Inés Restrepo Restrepo, es el alma de la Academia Antioqueña de Historia.