La máxima distinción que entrega el Club de la Prensa a los periodistas antioqueños, Premio a la Vida y Obra en el Periodismo, fue otorgada en este año, durante la celebración del día del gremio, al reconocido comunicador Javier Velásquez Yepes, gran señor y respetable profesional.
La máxima distinción que entrega el Club de la Prensa a los periodistas antioqueños, Premio a la Vida y Obra en el Periodismo, fue otorgada en este año, durante la celebración del día del gremio, al reconocido comunicador Javier Velásquez Yepes, gran señor y respetable profesional.
Javier Velásquez cumple hoy su labor en el noticiero Así va Antioquia, que se transmite por Múnera Estman Radio, de lunes a viernes en el horario de 7:00 a 7:30 de la noche, programa próximo a cumplir veinte años de labores, en medio de una gran audiencia. Javier ya cumplió 47 años de vida periodística, rodeado del respeto y el cariño de todos sus colegas.
Se inició en el periodismo cuando apenas tenía trece años, lidiando con linotipos en el periódico liberal El Correo de la ciudad de Medellín. Fue periodista deportivo y subdirector de noticias de Caracol, donde le correspondió dar la terrible noticia de la desaparición de la ciudad de Armero, luego de lograr comunicación con el piloto de una avioneta que le entregaba al mundo, a través de Velásquez Yepes, la triste y trágica noticia aquel fatídico 14 de noviembre de 1985.
El veterano periodista hace gala de un fino y pulcro manejo del idioma. La forma de entregar las noticias, la hábil y respetuosa conducción de la entrevista a sus personajes invitados, es toda una cátedra de buen periodismo y de agradable manera de suministrar la información a la opinión pública. Defiende con pasión sus tesis y con vehemencia se las hace conocer al oyente. Es también implacable y severo en las apreciaciones de lo que cree no se hizo bien. En el periódico EL MUNDO le reconoció a Norberto Puerta hace algunos años, que respetaba y admiraba a los políticos, pero que detestaba a los politiqueros. Con esa disquisición el maestro demostró claro dominio sobre la importancia de la política en los asuntos del poder. En medio de tanta incultura política, Javier sabe que no pueden existir democracia, progreso, ni programas, sin que exista la política. Obvio, de paso descalificó la politiquería y los daños que ella le produce a las democracias.
En el periódico La Patria del 22 de noviembre de 2015 el periodista Orlando Cadavid, en una original y amena columna titulada “En los zapatos de sus padres”, nos contaba, con nombres propios, cómo muchos de los grandes comunicadores de Colombia vienen legando o legaron en sus hijos el destino y la profesión que por años los guio a ellos. Javier Velásquez Yepes no fue la excepción. El ponderado periodista y docente en varias universidades de la Ciudad, Juan Carlos Velásquez Estrada, es el hijo que seguramente continuará en el tiempo entregándonos esas enseñanzas del gran maestro.
La labor de Javier y la de Juan Carlos Velásquez tienen un mérito adicional, llevan varios años entregándoles a los antioqueños una obra escrita llamada “Los 20 de así va Antioquia”, donde los personajes del año en Antioquia son deliciosa y punzantemente entrevistados por padre e hijo.
A Javier Velásquez y por intermedio de él a todos los periodistas, mil felicitaciones.