Campesinos de la vereda El Tomate, en Urabá, recuperaron sus tierras. La Unidad de Restitución de Tierras (URT) concedió 97 hectáreas de tierras a las familias que habían acudido a la institución para reclamar las propiedades.
Cinco familias campesinas, que fueron desplazadas a raíz de una matanza perpetrada por los paramilitares bajo el mando de los hermanos Castaño en la vereda El Tomate, recuperaron este martes las tierras que abandonaron, ubicadas en la región del Urabá.
La Unidad de Restitución de Tierras (URT) concedió 97 hectáreas de tierras a las familias que habían acudido a la institución para reclamar las propiedades, informó esa entidad en un comunicado.
La masacre fue perpetrada en 1988, cuando las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) asesinaron a 16 personas en El Tomate, que forma parte del municipio de San Pedro de Urabá, además de quemar 22 casas y obligar a los que sobrevivieron a abandonar sus propiedades.
La región del Urabá estuvo controlada por las AUC hasta su desmovilización en 2006 y hoy en día aún es una región convulsa debido a la violencia de las bandas criminales herederas de los paramilitares.
El director de la URT en Apartadó, Elkin Rocha, afirmó que "hace pocos años era impensable" que estas tierras "ubicadas en territorios ampliamente dominados por el paramilitarismo se restituyeran a sus legítimos dueños".
"Este es un gran avance del Gobierno en la reivindicación de un campo más democrático y en paz", agregó el funcionario.
Las familias restituidas también recibirán atención y acompañamiento de las instituciones para impulsar proyectos agrícolas, piscícolas, pecuarios y de vivienda en los terrenos, además de contar con programas de capacitación laboral, detalló la información.