Así lo informó el ente acusador en un comunicado en el que también confirmó que el Juzgado 14 de Bogotá negó la libertad a los demás involucrados en esta investigación.
Un juez del país otorgó la libertad al intendente de Policía Nelson Robles Munévar al considerar que la Fiscalía no aportó pruebas para mantenerlo preso por el envío de más de media tonelada de cocaína de Bogotá a Londres, escándalo conocido como el caso del 'narcojet'.
Así lo informó el ente acusador en un comunicado en el que también confirmó que el Juzgado 14 de Bogotá negó la libertad a Jairo Salazar, Jesús María Hurtado, y a los hermanos Alexander y
Walter de Jesús Arias Arango, involucrados en esa investigación.
El juez consideró, según la Fiscalía, que "no es claro el papel del uniformado dentro de la organización criminal" por lo que ordenó su libertad.
Añadió que "aunque se infiere que habría hecho parte de los hechos" no se ha "establecido de manera razonable que esta persona haya sido la que le llevó el uniforme al falso policía, quien
permitió el ingreso a los presuntos traficantes el 26 de enero de 2018 al hangar de la empresa Central Chárter, para facilitar la salida de un avión con media tonelada de cocaína".
Sin embargo, el intendente Robles seguirá sometido al proceso penal y responderá en juicio por los delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes agravado en concurso heterogéneo con utilización ilegal de uniformes e insignias en calidad de coautor.
En cuanto a los otros cuatro detenidos, la Fiscalía dijo que irán a juicio por los delitos de "tráfico, fabricación o porte de estupefacientes agravado, concierto para delinquir con fines de narcotráfico, lavado de activos y utilización ilegal de uniformes e insignias".
La historia se remonta al 8 de diciembre del año pasado cuando el albañil británico Martin Neil viajó a Colombia en compañía del chef italiano Alessandro Iembo y del español Víctor Franco Lorenzo. Los tres dijeron ser turistas, aunque su verdadera intención era comprar cocaína para la mafia italiana Ndrangheta, según informes de prensa.
Luego de ese primer viaje, los europeos regresaron el pasado 26 de enero junto al hermano desempleado del albañil y el peluquero español José Ramón Miguélez Botas.
Los cinco se hicieron pasar por adinerados ejecutivos y contrataron por 300.000 dólares un jet privado, que salió de un hangar del aeropuerto internacional El Dorado de Bogotá hacia el
aeródromo de Farnborough en el Reino Unido. Sin embargo, fueron capturados por agentes de Scotland Yard y la National Crime Agency.