Debido a que la presunta irregularidad se dio cuando él no era congresista, la alta corte manifestó que la investigación no hacía parte de sus competencias.
En una nueva audiencia realizada este lunes por la Corte Suprema de Justicia por el proceso sobre el cartel de las togas, se llevó a cabo una audiencia del exgobernador Luis Alfredo Ramos, en la que la alta Corte indicó que la Fiscalía haría las investigaciones, ya que esta labor no entra en sus competencia porque el caso en el presuntamente se favoreció el también exsenador, ocurrió cuando ya estaba por fuera del Congreso(elegido en 2002 y reelegido en 2006).
El dirigente antioqueño fue vinculado en esta investigación porque su caso supuestamente fue favorecido por la red de corrupción en la que presuntamente habrían participado Gustavo Moreno, Francisco Ricaurte y José Leonidas Bustos para favorecer decisiones judiciales en procesos contra varios políticos.
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Este lunes, Ramos asistió nuevamente a la Corte Suprema para ampliar su declaración y ratificó su inocencia.
Luis Alfredo Ramos manifestó que durante el proceso ante la Corte, “nunca he sido extorsionado o presionado para conseguir un resultado favorable de manera ilegal”.
También manifestó que el magistrado Leonidas Bustos, durante todo el proceso, avaló su detención preventiva (3 años y tres meses) y negó dos veces los recursos de apelación para revocar la retención.
Además, recordó que en el juicio se venció su tiempo como magistrado y subrayó que desvirtuó a los falsos testigos de manera legal y transparente.
En el caso de la entrega de sobornos al poder judicial también fueron imputados el senador Musa Besaile, quien ya aceptó su responsabilidad y del presidente del Partido Conservador, Hernán Andrade, quien también asistió a la audiencia.