La Alianza por la Niñez Colombiana convoca al Gobierno, a las instituciones, a padres y a la sociedad en general a erradicar cualquier forma de maltrato contra niños, niñas y adolescentes.
El fenómeno de violencia intrafamiliar contra niños, niñas y adolescentes (NNA) es hoy y seguirá siendo a futuro uno de los principales retos a enfrentar por parte del Gobierno, nacional, departamental y municipal, no sólo porque las cifras son alarmantes y por las consecuencias negativas que ocasionan en la salud física y mental de quienes la sufren, sino porque esas secuelas también deterioran la capacidad productiva de las generaciones futuras y allí la afectada es toda la sociedad.
Por eso, la significativa reducción de casos de violencia intrafamiliar contra NNA en 2019, respecto a los cuatro años anteriores, no puede ser un punto de llegada, sino un punto de partida que permita desarrollar las estrategias necesarias para eliminar todas aquellas formas de violencia contra los menores de edad.
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En su informe Violencia intrafamiliar contra niñas, niños y adolescentes, de 2015 a 2019, la Alianza por la Niñez Colombiana muestra en cifras y con testimonios la cruda realidad que viven NNA en Colombia, por lo que espera que ello contribuya para que las entidades territoriales y de orden nacional tomen decisiones más acertadas para lograr el cambio de los escenarios y circunstancias de riesgo en que tienen que vivir gran parte de los menores de edad en nuestro país.
De acuerdo con los datos de Medicina Legal, consignados en el informe, en ese lustro se conocieron 50.159 casos de violencias intrafamiliar contra NNA, con un porcentaje de 20,80% en 2015, 20,10% en 2016, 20,70% en 2017, 21,52% en 2018 y 16,88% en 2019, una significativa reducción en ese último año que, pese a todos, no autoriza aseveraciones de ninguna índole porque “podrían considerarse posibles factores relacionados con dicha disminución. En primer lugar, el no reporte de muchos casos y eventos; en segundo lugar, por la naturalización de la violencia, o por una real disminución debido a la efectividad de las acciones del Gobierno Nacional y las organizaciones de la sociedad civil para reducir la violencia intrafamiliar a través de programas, proyectos y campañas, entre otras acciones”.
Lo cierto es que, mirado por departamento, hay regiones de mayor preocupación por el número de casos que registran, y en su orden son Bogotá, Casanare, Arauca, Meta, San Andrés y Providencia, Cundinamarca, Risaralda, Quindío, Tolima, Boyacá, Amazonas y Antioquia, que ocupa el degradante decimosegundo lugar en esa clasificación, en la que la región oriental del país causa especial inquietud, bien porque esa situación puede estar asociada a los bajos niveles de escolaridad , a prácticas tradicionalmente aceptadas o al machismo que allí es más acentuado.
El informe también establece que, en cuanto a edades, de 0 a10 años son los niños los más afectados por estas violencias, pero de 10 años en adelante son las niñas, especialmente entre los 10 y 14 años, siendo ese el rango de edad en el que se detectaron más casos de violencia física y sexual.
Pero el tema que sí alarma es que al analizar la situación desde la perspectiva de los agresores, el informe de Alianza por la Niñez Colombiana establece que, desafortunadamente, “los principales agresores siguen siendo los padres, luego las madres, familiares cercanos, tíos y tías, padrastros y madrastras, cuidadores, abuelos, suegros y hasta cuñados”. Es decir, en muchos casos los abusadores están al interior de los hogares, hacen parte del núcleo familiar y es claro que allí existe una relación de dominio y sometimiento de los mayores hacia los menores de edad.
Estos datos, dice el informe, “plantean con urgencia un llamado a la protección de niñas, niños y adolescentes, desde el trabajo con las familias, las instituciones educativas y los espacios comunitarios. Adicionalmente es importante trabajar en la formación de los funcionarios encargados de recibir las denuncias y brindar atención a las víctimas”.
Esta realidad permite percibir que “la primera aproximación de NNA a la violencia es en el hogar, de ahí la importancia de que se parta de la completa eliminación del castigo físico por una práctica de crianza amorosa”, concluye Gloria Carvalho, secretaria ejecutiva de la Alianza por la Niñez Colombiana, y en ese sentido invita a que los planes de desarrollo, municipales y departamentales, incorporen en sus proyectos las estrategias de lucha contra todas las formas de violencia contra NNA.
Por eso, observa, “es clave conocer al detalle la magnitud del problema en cada uno de los territorios, para poder incorporar mediante este diagnóstico las estrategias, los planes y los programas, pero además los recursos para proceder” con la eficacia que se requiere.
Según explica Carvalho, varias de esas medidas están planteadas en la iniciativa “Inspire”, avalada por la Organización Mundial de la Salud, en la que se incluyen siete estrategias interrelacionadas para reducir la violencia contra NNA:
- Implementación y vigilancia del cumplimiento de las leyes.
- Normas y valores.
- Entornos seguros.
- Apoyo a padres y cuidadores.
- Reforzamiento económico y de ingresos.
- Servicios de respuesta y apoyo.
- Educación y formación en aptitudes para la vida.
Conclusiones
El informe de Alianza por la Niñez Colombia incluye, a manera de conclusiones, las recomendaciones dirigidas al Gobierno y local para enfrentar esta realidad.
Recomendaciones del Comité de Derechos del Niño (CDN):
•Adelantar acciones legislativas para que en los delitos contra niños, niñas o adolescentes el agresor sea efectiva y rápidamente separado y los procesos cumplan con la celeridad que reclama la prevalencia de los derechos de la infancia y la adolescencia.
•Formar a profesores, trabajadores sociales, personal de salud, jueces, fiscales, abogados, etc. para la denuncia de casos de presunta violencia intrafamiliar contra niños, niñas y adolescentes.
•Eliminar el artículo 262 del código civil en el que se permite la “facultad de corregir”. Velar para que el castigo físico esté prohibido explícitamente, crear conciencia sobre las formas positivas, no violentas de crianza para los niños, niñas y adolescentes.
•Crear mecanismos de denuncia aptos para niños, niñas y adolescentes, prestando apoyo jurídico, enjuiciamiento del agresor y velar por aplicar sanciones proporcionales e indemnización a las víctimas.
•Establecer un sistema de información que incluya datos sobre violencia contra niños, niñas y adolescentes, no solo los datos del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, explorando la magnitud, naturaleza y causas de violencias contra niños, niñas y adolescentes.
• Asegurar la existencia de programas de prevención, protección, rehabilitación y reintegración de calidad que incluyan servicios de salud y apoyo psicosocial, líneas telefónicas de ayuda gratuitas y refugios adecuados para todas las víctimas.
Recomendaciones de la niñez para prevenir el maltrato intrafamiliar:
“Yo recomiendo que haya más confianza entre los padres y los hijos y que tengan un diálogo más eficaz en la niñez”.
“Capacitaciones para que todo el mundo esté informado que hay entidades que protegen a los niños”.
“Para tías y mamás que no se estresen y comprendan”.
“Que haya más respeto entre jóvenes y adultos”.
“No pegarles a los niños y a las niñas”.
“Al ver maltrato informar acerca del problema para que tomen medidas frente al problema”.
“Sin ira, primero respira”.
“Que tengamos un buen derecho a la protección”.
“Que haya más protección a la familia, que se tomen los casos en serio y que nos ayuden”.
“Hablar primero con uno y entender la situación antes de que se desquiten con uno”.
“Que a la primera alerta reaccionen, una persona encargada de que no se violenten los derechos de los niños”.
“Que en el hogar haya más atención de parte de los padres.”
“Que los padres de familia tengan responsabilidad con los niños.”
“...Que no le peguen a sus hijos, que hablen con ellos para que ellos entiendan, porque si les pegan ellos no van a aprender con golpes, hablando si pueden entender y que den mucho cariño que tanto se merecen.
Violencia contra NNA 2015-2019