En marzo de 2011 la Superintendencia del Subsidio Familiar (Supersubsidio) ordenó la intervención administrativa total de Comfamiliar Camacol, argumentando, entre otras razones, “desgreño administrativo, falta de control y descuido con los recursos del sistema de subsidio familiar”.

Tras asumir la dirección Administrativa en 2014, la doctora Norha Helena Salazar Molina, con el acompañamiento de la Superintendencia del Subsidio Familiar y el personal de Comfamiliar Camacol, impulsó el Plan de Mejoramiento establecido por la medida de intervención, cuyo cumplimiento y verificación, permitió que en septiembre de 2016 el ente de control le informara al Ministerio de Trabajo su recomendación de levantar la medida cautelar de intervención.

Esta decisión fue avalada tras los resultados obtenidos, especialmente los relacionados con la gestión social, con el incremento permanente de los aportes los cuales ascienden desde el año 2014 a marzo de 2017 a $37.480 millones. De estos, en el mismo periodo fueron destinados a pagos de Cuotas Monetarias para los trabajadores afiliados por $17.140 millones.

“Hoy vamos a devolver nuevamente la caja de compensación, la misma que tendrá que luchar hombro a hombro tras el levantamiento de esta intervención con Comfama y Comfenalco Antioquia, la tarea no es fácil, es más, es una tarea titánica porque ya no va a estar la Superintendencia tratando de limar asperezas o hacer alianzas para que no le den duro a Camacol, hoy tienen la obligación de prepararse para asumir ese reto de competir con servicios, tarifas, programas y proyectos de inversión”, precisó el superintendente de Subsidio José Leonardo Rojas.

Añadió además que desde el inicio el proceso de intervención se realizó con el fin de alivianar la situación de la caja más no de liquidarla.

A marzo de 2017, la Caja de Compensación Familiar, contó con 1.276 empresas afiliadas y 21.637 trabajadores afiliados, para una población total de 52.826 trabajadores y beneficiarios afiliados, 22.000 de ellos en Urabá.

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Otro resultado destacado es la recuperación de los Fondos de Ley, los cuales presentaban un faltante de $1.800 millones y que a diciembre de 2015 tuvieron un saneamiento definitivo.

En adecuaciones y mejoras en infraestructura y dotación de servicios se invirtieron en el periodo 2014-2017, un total de $8.834 millones en sus diferentes sedes recreativas y administrativas. En el mismo periodo, han hecho uso de los parques y unidades recreativas de la Caja, beneficiando un total de 645.142 personas.

“Hemos logrado la desintervención administrativa. Hemos avanzado en la recuperación de la gestión social de la Institución, hemos logrado importantes alianzas, hemos recuperado la presencia institucional de la Caja. Ahora el futuro de Comfamiliar Camacol queda en manos de los empleadores y trabajadores afiliados”, aseguró la directora Administrativa de la Caja, Norha Helena Salazar Molida.     

Por su lado, la agente especial de intervención, Erika Valencia, explicó que la decisión de alzar la medida de intervención por parte de la Superintendencia de Subsidio se logró ya que en un 98% la caja cumplió con el plan de mejoramiento.

“Se encontró procedente el levantamiento de la medida de conformidad con el artículo 22719 del Decreto único Reglamentario de Trabajo de 2015, es de resaltar que el pasado mes de diciembre la Superintendencia, al quitar la intervención, decretó medida de vigilancia por un término de seis meses”, precisó Valencia.

Para finalizar, la directora Administrativa de Camacol resaltó la importancia de no cerrar empresas con gestión social, empresas que han estado por años en las regiones de Antioquia más vulnerables y necesitadas de asistencia y compromiso.