La actriz caleña está “feliz de la vida”, recientemente fue nominada a los India Catalina, ya está grabando la segunda temporada de La reina del flow, su productora de teatro marcha a toda máquina, se avecina el estreno de su nueva película y además próximamente se graduará de la universidad.
Carolina Ramírez es recordada por sus papeles como Rosario del Pilar Guerrero, en la telenovela La hija del mariachi, por interpretar a la mártir colombiana Policarpa Salavarrieta en la producción La Pola y también por encarnar a Yeimy Montoya en La reina del flow.
Esta actriz y bailarina caleña, de 35 años, contó que en su infancia tenía como gran sueño ser bailarina de ballet, y en su juventud lo logró, a los 15 años entró a hacer parte de Incolballet, compañía caleña de este arte, un sueño que le duró poco, pues debió mudarse a Bogotá. Sin embargo, los caminos de la vida la llevaron a transitar las “laderas de la actuación”, algo por lo que hoy en día se siente agradecida.
Y Fanny Mikey, la fallecida insignia del teatro colombiano, fue una de las culpables de ello. Al llegar a la capital del país, Carolina entró al mundo teatro nacional, antes de cumplir sus 20 años, y en este 2019 reconoció que ese personaje de pelo rojo ha sido fundamental en su carrera. “Lo digo muy segura, sin ella yo no sería quien soy hoy”.
No obstante, ella se define como una amante de todas las artes y por eso dijo que su ser es baile, así como también actuación.
Su último papel en la televisión nacional, el ya mencionado de Yeimy Montoya, la tiene “flotando en el aire” y lo dijo al reconocer que ha sido una de las mejores elecciones de su vida, pues en un momento en el que no estaba en sus planes hacer televisión, apreció la oportunidad de interpretar a la protagonista de La reina del flow, grabada en la Comuna 8-Manrique de Medellín, y no se pudo negar a ello.
Dice que está en un punto de su vida en el que quiere elegir qué hacer, y aunque en muchas ocasiones la televisión no ha sido su elección, esta vez sí, la balanza se inclinó a ello precisamente por su historia. Narró que la vida de Yeimy Montoya es ejemplo de cómo superar los propios miedos, de la satisfacción que hay en lograr aquello que siempre se soñó y de aprender a perdonar, “algo que es tan importante para los colombianos en este momento”, consideró.
Ese ha sido el acercamiento que ha tenido en su vida con la música, pues aunque el papel es de una cantante, ella dice, muy enfáticamente que no sirve para cantar. “Cuando uno prepara un personaje aprende muchas cosas, se quedan en la mente para la cultura general, y poder acercarme un poco a la música con Yeimy me dejó muchas enseñanzas”, expresó.
Tras 12 postulaciones en los India Catalina, entre ellos al de Mejor actriz protagónica, reconoció que La reina del flow ha sido una de las mejores elecciones de su vida.
“Sí, vivo un momento perfecto. He tenido la opción de poder gozarme mi vida en la actuación, y de poder esperar también cuando lo he necesitado. Muchas personas se sueñan ser felices en lo que hacen, obviamente yo también tuve ese sueño, y ahora pienso en lo afortunada que he sido”, narró.
Cabe destacar que actualmente está grabando la segunda temporada de La reina del flow y que esa serie será estrenada próximamente en Telemundo Internacional, el 13 de marzo.
Igualmente, pronto se estrenará la película Niña errante, el séptimo largometraje escrito y dirigido por Rubén Mendoza. Ocurrirá el próximo 4 de abril y así Carolina Ramírez regresará al cine, un arte del que confesó disfruta porque le permite interpretar personajes más fortalecidos, más naturales, cargados de un mayor valor.
Y aunque su carrera cinematográfica ha sido corta, con cuatro actuaciones, como Herlinda en Soñar no cuesta nada (2006), de Rodrigo Triana; Vivian en Cuando los hombres quedan solos (2014), de Fernando Martínez; Angie en Ciudad Delirio (2014), de Chus Gutiérrez, y el personaje aún inédito en Niña errante, Carolina Ramírez dice que en su carrera siempre habrá un espacio para el cine, porque es un arte en el que también soñó estar.
Otra de sus pasiones es el teatro. Hace algunos años, se le “incrustró” la idea de conformar una productora de teatro con su esposo en su natal Cali, y ese propósito, ya materializado, es hoy día un motor de su vida.
La empresa se llama Casanova Producciones y se ha encargado de crear y producir diferentes montajes teatrales en Colombia; como Toc toc, Conversaciones con mamá, Los Bonnobos, Burandanga, Lo que queda de nosotros o Contussas, y en algunos de ellos ha actuado ella.
Finalmente, después de esbozar todos estos proyectos, Carolina Ramírez le contó a EL MUNDO que en este “momento perfecto” de su vida está ad portas de recibir su título de profesionalización en arte dramático con la Universidad de Antioquia.