Según indicó Campetrol, no revertir la situación tendría graves consecuencias para el país, especialmente para algunas regiones donde la actividad aporta más del 50% del PIB.
La Cámara Colombiana de Bienes y Servicios Petroleros (Campetrol), hizo un llamado este miércoles al Gobierno Nacional y en general a la industria de hidrocarburos para diseñar e implementar rápidamente un plan de choque que potencie la actividad del sector en el corto plazo y permita incorporar nuevas reservas y producción para alejar la pérdida de la autosuficiencia y garantizar la seguridad energética del país en materia de hidrocarburos.
“El país agota sus reservas. Tenemos un horizonte precario de autosuficiencia de 5,1 años. Esto se profundizó con la caída de los precios del petróleo, pero también se debe a factores estructurales no resueltos en Colombia como la competitividad regional, el clima de inversión y la estabilidad jurídica”, señaló el presidente ejecutivo del gremio, Germán Espinosa.
Campetrol explicó que el plan de choque que urge el país, tendría varios componentes que parten de la cohesión de Gobierno, industria y territorio para trabajar en temas cruciales como la reforma al Sistema General de Regalías, diálogos regionales en los que se desmitifiquen falsas disyuntivas como que debemos elegir entre agua y petróleo, se evidencien los beneficios para el desarrollo regional y del país que deja la industria y se exponga claramente que las empresas operadoras, así como las de bienes y servicios, están comprometidas con cuidar el medio ambiente y tienen la preparación profesional y técnica para hacerlo.
Adicionalmente, el gremio destacó la necesidad de cambiar el modelo de relacionamiento del sector con las regiones que ha sido transaccional, extorsivo y permisivo, donde se resolvieron problemas de corto plazo, dejando de lado la sostenibilidad de una industria indispensable para el país y en especial para las regiones.
En ese sentido, Campetrol aseguró que si bien Colombia no es un país petrolero, sí es petróleo dependiente, pues la industria representa, aún con la actual coyuntura de precios bajos, el 34% de las exportaciones, el 10% de los ingresos fiscales de la Nación y el 24% de la IED; pero las cifras son más determinantes en la economía regional, pues en departamentos como Casanare y Meta, el sector representó el 59% y el 54% del PIB 2016, respectivamente.
De igual forma, reiteró que si no se incorporan nuevas reservas y producción, el país está ad portas del desabastecimiento y tendría que importar crudo para cargar las refinerías a partir del 2022, con un impacto desastroso en las variables macroeconómicas, por lo cual es importante avanzar en el debate que permita la pronta implementación de alternativas de extracción como el recobro mejorado y los Yacimientos No Convencionales, este último, según estimaciones del gremio, ampliaría entre cinco y diez años la autosuficiencia energética de Colombia.
“Campetrol comparte la visión del Gobierno en el sentido que Colombia hoy cuenta con la regulación y el conocimiento necesarios para poder implementar el ‘fracking’ sin comprometer nuestros recursos ambientales e hídricos. Colombia tiene petróleo in place ¿por qué negarnos a convertirlo en reservas, producirlo y generar desarrollo regional sostenible?”, expresó Espinosa.
Por último, Campetrol aseguró estar presto para aportar en el diseño del plan de choque, que además deberá incluir temas de largo plazo, como incentivos a la exploración onshore y de gas y muy especialmente a la exploración costa afuera (off shore) que es la nueva frontera exploratoria del país.
Nuevo atentado terrorista a oleoducto Caño Limón Coveñas en Arauca