En general, todas las ciudades son similares, unas más bellas que otras, por el contenido de su infraestructura física urbana, con sus habitantes, sistemas de comunicación, distribución de productos, recreación, impacto de la acelerada y poderosa sociedad de consumo; pero, lo que las diferencia esencialmente, es la calidad de vida que pueden tener sus habitantes, que se logra en cada una de ellas, de acuerdo con políticas propias.

La calidad de vida urbana depende de muchos aspectos, entre otros: de su ubicación geográfica, político-administrativos, economías urbanas, desarrollo y calidad de su infraestructura física, administración, momento histórico.

Es diferente la calidad de la vida urbana en ciudades localizadas en la zona montañosa, que en los valles y las costas. Las diferentes condiciones climatológicas, requieren medidas ambientales específicas.

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Bogotá y las capitales de las divisiones político-administrativas de Colombia, están estructuradas con diferentes contenidos humanos, a los que se debe dar respuesta adecuada sobre la demanda de servicios propios; esto hace que la calidad de vida en ellas sea más compleja, que en la de ciudades menores.

Las economías urbanas en Colombia  son muy diferentes de acuerdo con la dinámica propia de cada una de las regiones. El centralismo ha llevado a que Bogotá y Medellín, muestren calidades de vida urbana muy diferentes a ciudades intermedias, y que decir, del pequeño municipio.

Hay que mirar y analizar cuáles son, entre otros, los grandes contenidos que influyen en todo esto. Es un hecho que se está tomando conciencia muy tarde, sobre la calidad del medio ambiente. En Medellín, la calidad del aire está diagnosticada como baja.

Son muchas las causas que han conducido a esto último; se ha venido aplicando medidas que parece no han dado los mejores resultados. La circulación urbana, es uno de los factores que más miradas ha tenido; los vehículos automotores son grandes contribuyentes a la contaminación del aire, y se tomó la medida del pico y placa, que en mi concepto no es muy positiva; razón, el número de viajes no disminuye, son casi una constante, lo que pasa es que se realizan a otras horas: congestiones anteriores o posteriores a la medida, aplazamiento de los viajes.

Yo creo que el problema más bien es que ha aumentado mucho el número de viajes por vehículo, especialmente particulares; se va en automóviles particulares a compras cercanas, eventos cívicos y religiosos, a recoger, llevar, traer a… Para esto hay que educar a la ciudadanía, que también es responsable de la calidad del medio ambiente.

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Pero hay algo muy positivo: el empeño del municipio de Medellín y del Área metropolitana por recuperar y densificar el área urbana y las zonas rurales, con árboles representativos de nuestra cultura. Además de la concientización de la comunidad sobre este tema, que se adelanta por la televisión, con el maravilloso programa: Diálogos metropolitanos, tema que ilustran y divulgan las autoridades de la institución Área Metropolitana.

El pasado nos interroga sobre: ¿Para qué, en las vías laterales de la avenida La Playa, disminuyeron la velocidad de circulación de los automotores, con la colocación de materas en el carril vehicular? ¿Quién y cómo las van a sostener en la época de verano?

¿Cómo van a facilitar el crecimiento y a sostener los árboles plantados en campo abierto, durante el verano? Son muy vulnerables al tiempo seco y a las irresponsables y tradicionales quemas, en gran parte provocadas por la comunidad. Es muy grande la inversión en este maravilloso proyecto, y el tiempo cuenta…