Muchas bandas inglesas y europeas en los setenta como Led Zeppelin, UFO, Scorpions, Motorhead, Black Sabbath y Judas Priest entre otras, estaban siendo conocidas por su originalidad en el hard rock y el heavy metal. El movimiento punk que iniciara en la segunda mitad de la década, de alguna manera opacó a muchas bandas de hard rock y a la vez, vitalizó a otras bandas emergentes como las que pertenecieron al movimiento de la nueva ola del heavy metal británico (NWOBHM por sus siglas en inglés), término que se le atribuye a Alan Lewis, editor de la revista Sounds. Fue entre 1979 a 1981 que bandas ya reconocidas por los rockeros (pero que citamos algunas para lectores neófitos en el tema) como Iron Maiden, Saxon, Def Leppard, Raven y Venom entre otras, empezaron a sonar más rápidas y potentes.

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Y fue en esta época que Judas Priest, ya con cinco álbumes de estudio y un disco en vivo, grabarían este trabajo que marcaría en adelante su nuevo sonido, potenciando además, su imagen de cuero, correas y taches. Y acá es donde muchos expertos escritores y estudiados del rock, como John Tucker y Neil Daniels, concuerdan en que Judas Priest no pertenece al NWOBHM, más bien inspiraron a estas bandas, como también lo confirman músicos de Venom y Blitzkrieg.

Templo del rock

El vocalista Rob Halford, los guitarristas Glenn Tipton y K.K. Downing, el bajista Ian Hill y el nuevo baterista Dave Holland (1948-2018, que venía de la agrupación Trapeze y que reemplazó al sensacional Les Binks), se reunieron con el productor Tom Allom en Startling Studios, una propiedad de gran extensión, que había sido de John Lennon, pero ahora pertenecía a Ringo Starr.

Dado lo importante que resultaría ser este álbum, es sorprendente que Priest no hubiera terminado de escribir todas las canciones cuando entraron a grabar, ya que tenían alrededor del 60% de las canciones escritas, pero temas como The Rage y Living After Midnight fueron creadas en el estudio. El trabajo comenzó el 1 de febrero de 1980 y se completó a fines de ese mes y fue el primer álbum de estudio que Priest hizo con Tom Allom, aunque había estado al frente de su anterior en vivo Unleashed In The East. Tom colaboró con la banda en sus próximos cinco álbumes de estudio y un lanzamiento en vivo a lo largo de los años 80 y posteriormente regresó para coproducir Firepower de 2018.

Para los 30 años, Judas Priest lanza el DVD del concierto en vivo con todo el album.

La banda grabó en varias salas de la casa, no solo en el estudio, experimentando para obtener el mejor sonido para cada instrumento, querían algo realmente en vivo para el álbum que sintetizara el entorno de las fábricas metalúrgicas y pusieron mucha imaginación para crear sonidos particulares en el álbum, usando cubiertos, reventando botellas, golpeando tacos de billar, lanzando micrófonos y hasta usando sirena policíaca. Antes las agrupaciones tenían que ser muy creativas, porque las ventajas que ofrece la tecnología de hoy todavía eran una fantasía.

A la banda le llegó la portada sin tener aún el título. La famosa cuchilla de acero inoxidable tomada entre los dedos sin rastro de sangre (que luego sangraría en los diseños promocionales de los 30 años del álbum), tenía la marca del metal británico y aunque no es claro quién sugirió el nombre, se dice que Halford lo tomó de la empresa en que trabajaba su padre, pero también se le atribuye a Ian Hill referenciando a los trabajadores de las siderúrgicas. Como haya sido, estuvieron de acuerdo en que el nombre British Steel representaba muy bien a la clase trabajadora y tenía sentido para el sonido del heavy metal británico.

Formación 1980: K K Downing, Rob Halford, Glen Tipton, Ian Hill y atrás Dave Holland

British Steel fue lanzado por Columbia en abril de 1980, y estuvo a la altura de las expectativas, alcanzó el número 4 en la lista británica, que sigue siendo su posición más alta, y el número 34 en los Estados Unidos. Este álbum fue prensado en Colombia por CBS ese mismo año, lo que fue muy valorado por la comunidad roquera, a pesar de que el diseño original de la carátula no se conservara, ya que las fotos de la portada posterior quedaran a sólo 2 colores. Y es que era algo común con las disqueras locales eliminar el colorido en los álbumes de rock en aquella época, incluso dejando las contraportadas en blanco y negro. Pero estas gemas locales tenían todo el encanto para los coleccionistas que luego adquirirían su pasta importada.

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Hubo canciones exitosas como Breaking The Law, Living After Midnight y el himno United, pero la vena más metal del álbum lo hacen temas como Rapid Fire, Metal Gods, Grinder y The Rage, muchas de ellas imprescindibles en todo concierto de Priest. Este es el acero británico que hizo parte del cambio en el heavy metal.