La Arquidiócesis y la Alcaldía de Medellín, que son los organizadores de la visita del papa Francisco, tomaron la decisión, en conjunto con la Aeronáutica Civil, de suspender las operaciones del Aeropuerto Olaya Herrera (OH) por seguridad y logística, desde este domingo a las 7:00 p.m. hasta el lunes 11 de septiembre a las 5:30 a.m. Lo correspondiente a la aviación comercial se trasladará durante esta semana al Aeropuerto José María Córdova (JMC) de Rionegro, sin que esto altere su funcionamiento.

El gerente general del Aeropuerto Olaya Herrera Establecimiento Público, Jesús Alberto Sánchez Restrepo, explicó que debido a la visita del Sumo Pontífice, este aeropuerto estableció un plan de contingencia para el traslado de su operación durante esos ocho días en que estará cerrado. 

A diario se tienen, en promedio en el OH, alrededor de 200 operaciones aéreas, contando las salidas y las llegadas. “El 70% de las operaciones del aeropuerto las llevan a cabo las aerolíneas de aviación comercial regular, es de decir las empresas Satena, EasyFly y ADA que viajan hacia diferentes destinos regionales y algunos nacionales”, como es el caso de Bogotá, Manizales, Montería, Pereira, Bucaramanga, Ibagué, Corozal, entre otros.

En ese sentido, la idea es garantizarle a esas tres aerolíneas que sigan prestando el servicio comercial desde el JMC. Es así que los pasajeros de Satena y ADA, “podrán hacer su checking desde la Terminal del OH, luego serán trasladados a Rionegro y serán embarcados directamente en las aeronaves que van a cumplir sus itinerarios”, dijo Sánchez Restrepo.

Por su parte, Jorge Hugo Duarte Guzmán, gerente del concesionario Airplan del Aeropuerto Olaya Herrera señaló que el resto de operaciones como las de los helicópteros se realizarán por el OH, porque no necesitan la longitud de pista de una aeronave.

Mientras que las demás operaciones, como las deportivas, de instrucción, de aviación general, corporativa y privada, “algunas van a parar y otras irán a operar a otros aeropuertos del país”, indicó Duarte Guzmán, explicando que la Aeronáutica Civil les ha dado todas las garantías para que puedan hacerlo durante esa semana, ya que técnicamente “no todas la operaciones se podrían realizar por el JMC”.

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Freddy Jaramillo Giraldo, gerente del Aeropuerto JMC, comentó que para poder atender la operación comercial del OH se reducirán las frecuencias diarias de algunos vuelos, “es decir que si por ejemplo, una aerolínea volaba tres veces a un destino, entonces va a volar una sola vez”, indicando que los vuelos se realizarán toda la semana, a excepción del sábado 9 de septiembre que llega a Medellín el Sumo Pontífice.

Por ejemplo, “Satena no va a operar desde el JMC sino desde el Cacom-5 de la Fuerza Aérea, que son vecinos del aeropuerto en Rionegro y van a utilizar su pista”, indicó el gerente de este aeropuerto.

El José María Córdova atenderá 140 operaciones adicionales del OH a diario, 900 vuelos aproximadamente durante la semana de cierre y a 2.800 pasajeros más. Actualmente realizan 180 operaciones día tras día, mientras que el de Medellín atiende entre 200 y 230.

¿Qué debe tener en cuenta el usuario? 
Para el traslado de operaciones durante esa semana en que se mantendrá cerrado el Olaya Herrera, cada aerolínea contactó a los pasajeros y les informó que la Alcaldía de Medellín dispuso del transporte para trasladarlos hasta Rionegro.

Duarte Guzmán señaló que ADA y Satena citaron a los pasajeros en el OH, seguidamente los transportarán en buses hasta el José María Córdova, aclarando que “no habrá sobrecostos para los pasajeros”. Mientras que los que viajan con EasyFly, fueron citados directamente al JMC, debido a que esa aerolínea también opera allá.

Lo mismo sucede con aquellos que llegan a Rionegro, la Administración Municipal también está a cargo del transporte para que sean trasladados hasta Medellín. 

Teniendo claro que no habrán afectaciones monetarias en este caso, es importante alertar los tiempos para que puedan cumplir con sus programas. Los impactos para quienes se movilizan por el Olaya Herrera se traducirán en tiempos adicionales, sin embargo, los directivos de este aeropuerto le solicitan amablemente a la ciudadanía tener paciencia. 

Asimismo, los pasajeros al salir desde el JMC deben tener en cuenta lo siguiente. “Si su vuelo sale a las 9:00 a.m., el pasajero que usualmente llega a las 8:00 a.m. al OH, deberá madrugar y estar entre las 7:00 a.m. y 7:30 a.m. para ser transportado hasta Rionegro” añadió el gerente del concesionario Airplan, explicando que madrugar un poco más de lo acostumbrado sería la forma para cumplir con los tiempos programados de cada itinerario.

Además, es importante hacer hincapié en que la ciudadanía no podrá ver al papa Francisco en el JMC, a pesar de que aterrice en su pista, “el avión será atendido en la base de la Fuerza Aérea y de ahí lo embarcarán en un helicóptero hasta Medellín”, recalcó Duarte Guzmán.

Cabe recordar que el Sumo Pontífice podrá verse el sábado 9 de septiembre en la Misa Campal en el Olaya Herrera desde las 10:00 a.m. hasta el medio día, y durante los recorridos que realizará por la capital antioqueña en el papamóvil.

A este acontecimiento se convocarán alrededor de 800.000 fieles en la pista del aeropuerto, beneficiándose Medellín con su visita. Por lo tanto toda la logística para garantizar la seguridad a sus habitantes estará a cargo de la Fuerza Pública. En este caso de la Policía, del Ejército Nacional, del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Medellín, entre otros. “Nosotros como operadores del Aeropuerto le entregamos el espacio a la Administración Municipal para que adecue todo lo necesario y se pueda realizar la Misa”, agregó Duarte Guzmán.

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También complementó con que se tendrán unos pre-filtros para que las personas puedan acceder por la carrera 70 a las instalaciones del OH, siendo supervisados por la Fuerza Pública, “cuando se llene el lugar se cerrarán definitivamente las puertas”, comentó. Por cada 50.000 visitantes se dispondrán dos ambulancias, doce equipos de intervención y 60 servicios sanitarios, entre otros.

Los dos aeropuertos estiman regresar a las labores de su cotidianidad el próximo 11 de septiembre.

Movimientos de las aerolíneas
Según Felipe Botero Castrillón, country manager de Despegar Colombia, los países que han registrado el mayor número de reservas para ver al Sumo Pontífice en Colombia han sido España, México y Estados Unidos, mostrando su interés de viajar a Bogotá. Mientras que a Medellín, mayoritariamente se destacan los norteamericanos.

Además, las ciudades de las cuales se han hecho el mayor número de reservas hacia Bogotá han sido Barranquilla, Bucaramanga y Cali. A Medellín: Bogotá,  Bucaramanga y Cali y hacia Cartagena sobresalen: Bogotá, Cali y Medellín. Para todas esas ciudades los pasajeros viajarán de tres a cuatro días aproximadamente.

“Nuestros resultados muestran que los colombianos se prepararon con tiempo para viajar a las ciudades donde el papa Francisco estará presente”, expresó Botero Castrillón, argumentando que para este acontecimiento que es de importancia para los locales, para la región y para los extranjeros, se realizaron reservas con más de 95 días de anticipación.

En cuanto a los precios de los tiquetes, María Eugenia Oriani Ucros, gerente de Almundo.com S.A.S. manifestó que desde Bogotá a Cartagena, el valor aproximado de un vuelo directo en temporada baja para el 10 de septiembre ha costado en promedio $170.000, mientras que durante la semana de la visita del papa se vislumbran tiquetes hasta por $310.000, lo que significaría un crecimiento del 82%.

El 7 de septiembre desde Cali-Bogotá incrementaría un 73% ($260.000-$450.000) y Santa Marta-Bogotá aumentarían hasta un 150% ($300.000-$750.000). El 9 de septiembre desde Barranquilla-Medellín, incrementarían un 35% ($260.000-$350.000) y de Cali-Medellín un 50% ($400.000-$600.000).

Hotelería y visitantes
De acuerdo con el Sistema de Información Hotelero de la Asociación Hotelera y Turística de Colombia (Cotelco), el porcentaje de ocupación hotelera por ciudades evidenció que durante el mes de septiembre de 2016, Bogotá tuvo un 62,76%, Medellín (73,26%), Cartagena (73,90%) y Villavicencio (52,65%).

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No obstante, a pesar de que queden tres días para que el papa arribe al país, el presidente de Cotelco, Gustavo Toro Velásquez señaló que la hotelería está comportándose de forma normal, sin embargo, “esperamos que de aquí a que llegue el papa aumenten las reservas”. Respecto a Medellín, la secretaria de Desarrollo Económico de la Alcaldía, María Fernanda Galeano Rojo, dijo que estiman una ocupación del 90%. Ya que la capital antioqueña, “tiene disponibilidad de 23.000 camas y esperamos 176.000 visitantes nacionales y extranjeros”.

Migración Colombia también dio a conocer su proyección que entre el 6 y el 10 de septiembre, esperan la llegada al territorio nacional de más de 8.000 ciudadanos extranjeros. Christian Krüger Sarmiento, director general de esa entidad migratoria explicó: “Esta cifra equivaldría a un incremento, en materia de ingresos, cercano al 11%, si se compara con el mismo mes del año anterior”.

Se cerrará el espacio aéreo
El espacio aéreo en el José María Córdova se cerrará durante quince o 20 minutos aproximadamente a la llegada del papa.

“Las únicas aeronaves que estarán en el espacio aéreo de Medellín  durante la visita del papa son las que tienen que ver con la seguridad del Santo Padre”, especificó Duarte Guzmán.

Mientras que sobre Rionegro, Jaramillo Giraldo señaló que se realizará un protocolo autorizado por la Aeronáutica Civil, similar al del Jefe de Estado.

Esto significa que se le dará prioridad a la aeronave que transportará al papa, cerrándose el espacio aéreo. “Una vez que él aborde el helicóptero y salga del José María Córdova a Medellín, se reanudarán las operaciones”. Adicionalmente, también se tendrá un dispositivo de seguridad que estará a cargo de la Fuerza Aérea Colombiana.