Entre las medidas se destaca la implementación de pico y placa para los sábados.
El Área Metropolitana del Valle de Aburrá (Amva) decretó este jueves el inicio del periodo de Estado de Prevención de Calidad en el Aire luego de que 16 de las 18 estaciones de monitoreo de la calidad del aire registraran ICA naranja en las últimas 30 horas.
La medida regirá desde mañana viernes 23 de febrero y se extenderá hasta el 7 de abril, tiempo en el que la ciudad está más predispuesta a enfrentar episodios de incremento en la cantidad de PM 2.5 en su atmósfera.
El pico y placa continuará en su horario habitual para 4 dígitos para carros particulares, camiones y volquetas. Sin embargo, la restricción también irá en 2 dígitos para motos de 2 tiempos y 4 tiempos.
Los camiones y volquetas con modelos inferiores o iguales a 2009 contarán con un aumento en sus horas de restricción en circulación que irán de 5:00 a.m. a 8:30 a.m. y de 4:30 p.m. a 9:00 p.m. bajo la misma medida de 4 dígitos que opera normalmente.
Adicionalmente, los sábados habrá pico y placa alternando por semana los números impares y pares para vehículos particulares, motos de 2T y 4T, camiones y volquetas. Este sábado 24 de febrero la medida cobijará las placas terminadas en 1, 3, 5, 7 y 9 y contará con el mismo horario que se maneja en semana.
Según María del Pilar Restrepo, subdirectora ambiental del Amva, desde la 1:00 a.m. de este jueves se ha presentado un incremento atípico en las concentraciones de PM 2.5 en todas las estaciones del Siata. La razón se debe a la baja nubosidad y una estabilidad atmosférica, que implica poca presencia de vientos que no favorece la dispersión se contaminantes.
Lo cierto es que los niveles de las estaciones de representación poblacional han marcado en las últimas horas niveles que oscilan entre los 36 y los 53 microgramos por metro cúbico de PM 2.5, es decir, marcando un nivel naranja en la tabla del índice de la calidad del aire (ICA), lo que genera riesgo para grupos sensibles.
En promedio, el valle de Aburrá maneja niveles entre 25 y 28 microgramos de PM 2.5, que según el ICA sería nivel amarillo, lo que representa una calidad del aire moderada. Según la Organización Mundial de la Salud, el nivel recomendado para no generar afectaciones a la salud debería ser de 10 microgramos por metro cúbico.
La principal razón para que cada año se hable de una contingencia ambiental en el área metropolitana se debe a la estabilidad atmosférica que se da en el cambio de temporada seca a temporada lluviosa. Se estima que sea entre marzo y abril y entre septiembre y octubre.
Sin embargo, también se debe tener en cuenta el crecimiento demográfico que se traduce en un incremento en construcción, industria y parque automotor. El Amva estima que cada año están ingresando más de 140.000 vehículos.
Asimismo, la morfología que presenta el valle de Aburrá brinda las condiciones para sufrir los efectos de la contaminación debido a lo estrecho del territorio entre montañas, lo que dificulta la dispersión del material particulado.
Por el momento, las autoridades continuarán el monitoreo constantemente de las estaciones del Siata, en caso de que se suba el Estado de Prevención (Nivel II) al Estado de Alerta (Nivel III), se informarán nuevas medidas.
Durante el periodo en que se mantenga el Estado de Prevención se recomienda a las personas usar el transporte público y disminuir, en lo posible, el tiempo en actividades al aire libre.
El Valle de Aburrá cuenta con la red de monitoreo de calidad del aire más moderna y robusta de Colombia: 38 estaciones de monitoreo de distintos contaminantes, 250 Ciudadanos Científicos que tienen en sus hogares sensores para medición de temperatura, humedad y PM 2.5 que complementan los aparatos para la toma de decisiones ante episodios críticos.