Con el Hay Festival Jericó, del 25 al 27 de enero, y el Hay Festival Medellín, del 29 de enero al 1 de febrero, el llamado Festival de las ideas cumple su cita en Antioquia. Dos de sus invitados hablaron de la relación música y literatura.
Cuando le dieron el premio Nobel a Bob Dylan (abril de 2017), se estaba diciendo al mundo algo muy importante, eso cree Joselo Rangel, músico, compositor, escritor e integrante de la banda mexicana Café Tacvba.
Para él, todas las canciones son valiosas, y “eso está implícito en el mensaje al mundo que la Real Academia Sueca de las Ciencias dio al entregar el premio honorífico a Dylan”, señaló el mexicano, quien hará parte de los invitados del Hay Festival Medellín.
Joselo estará el jueves 31 de enero de 2019 en el Teatro Mamm, a las 5:30 p.m., conversando sobre música y literatura. Es un cronista agudo y junto a Juancho Valencia contará las historias detrás de su doble vida como rockstar y escritor.
No obstante, el viernes 1 de febrero, Jacobo Celnik, experto en el rock nacional, estará en el mismo lugar, a las 7:00 p.m., en conversación con Jaime Andrés Monsalve. La charla tratará las infidencias de cómo hace sesenta años se inició el movimiento del rock en Colombia.
Estos dos artistas, hablaron con EL MUNDO sobre su quehacer literario, el origen de sus investigaciones, los temas que los apasionan como escritores y las relaciones que encuentran entre música y literatura.
¿Cuáles son las conexiones que existen entre la literatura y la música?
En mi caso, aprendí a tocar la guitarra para hacer canciones, porque lo que me interesaba era conectarme con las historias, no tanto hacer solos de guitarra o ser un virtuoso de este instrumento; quería componer canciones, comunicarme a través de ese matrimonio: letra y música.
¿Cuándo la literatura cree usted que se aparta de la música?
Para mí, son algo que no puede separarse. La literatura, la prosa, tiene un ritmo, tiene cadencia, así lo explico en términos musicales.
En el matrimonio literatura y música, ¿cuáles son las virtudes de cada uno que deben respetarse para conservar su esencia?
Habrá ciertas reglas que hay que respetar, pero parte de lo que me interesa es, precisamente, no tener reglas, ser tan libre como para poder hacer lo que uno quiera.
Siempre que se pueda conectar con un lector o con un escucha, se puede hasta inventar cada uno sus propias reglas.
Y en ese rol de escritor, ¿qué temas lo han inspirado a conectarse con el público?
En la escritura, lo que me interesa mucho son las relaciones humanas, las decisiones que tomamos como seres, es mostrar el ambiente musical donde yo me muevo, de ahí me salen estos grandes temas.
Acabé de publicar Los desesperados, y habla sobre una banda ficticia, un trio; podría parecer que de lo que se trata la novela es de música, pero no, más bien trata de las relaciones humanas.
¿Cuál es la literatura que a Joselo le gusta?
La que cuenta historias. Yo cuento historias en cualquier lado.
Pero, ¿no siempre los compositores de canciones están conscientes de que es una forma de hacer literatura?
Es cierto, pero está bien que no se den cuenta o que no nos demos cuenta, porque lo que hacemos es también para que la gente lo escuche. A lo mejor si pensáramos todos los compositores que somos literatos, pues tal vez la genialidad se empaña y se torna engreída.
Foto: Blog Periodismosinafan
¿Cuál es el punto de partida de su obra La causa nacional?
Las historias del rock colombiano.
El rock llegó a Colombia por la radio, a través de La Voz de Antioquia, ahí se emitieron los primeros rocanroles; eso permitió que gente joven conociera este ritmo y tuviera la curiosidad de crear una banda.
El primer rocanrol que se grabó en Colombia se llama Very, very well, y lo grabó Carlos Román y su Conjunto Vallenato en 1968, ellos siendo vallenatos era normal que incursionaran con rocanroles pues era el ritmo de moda.
La grabación permitió que en la década del sesenta, pioneros de esta música emprendieran proyectos que básicamente buscaban imitar a los Beatles, es el caso de los Yetis (Medellín), o The Speakers y Los Flippers (Bogotá).
¿Quiénes son los protagonistas de la cadena del rock en Colombia?
Todos aquellos que han apoyado al rock de alguna manera, empresarios, disjokeys, músicos, managers, coleccionistas, creo que cada uno, desde su perspectiva, ha hecho un aporte al status y difusión del rock en Colombia.
¿Considera que existe un vacío histórico en términos del estudio y la exploración de la historia del rock en Colombia?
Sí, lo hay, en cuanto a que no se han publicado libros del rock en Colombia. Las pocas investigaciones que hay están desarticuladas de la cadena del libro o del mercado, o terminan siendo tesis de grado laureadas que no salen de una biblioteca universitaria o proyectos institucionales ideados por entes públicos.
Entonces, hace falta que los investigadores se metan dentro de la historia del rock en Colombia.
¿A Jacobo Celnik cuál es el momento que más le gusta de la historia del rock en Colombia?
Los setentas, cuando surge la Banda Nueva, Columna de Fuego y Génesis de Colombia; esa década me parece chévere, porque en ese tiempo las bandas logran dialogar con diferentes géneros y crearon fusiones, que hoy en día son normales y conocidas, pero que hace cuarenta años no tanto.
Se logró, entre otras cosas, vincular a la música del Pacífico con el rock, como es el caso de Génesis de Colombia.
Jacobo, usted sustenta en La causa nacional que Medellín es la capital del rock en Colombia, ¿por qué?
Tal vez es la ciudad más rockera de Colombia, por lo que sucedió con el punk, con los Yetis o lo que sucedió con el movimiento de artistas que revivieron al rock en la década del ochenta, cuando el rock estaba prácticamente muerto en Colombia, por eso creo que Medellín juega un papel fundamental en la historia del rock nacional.
-Se trata del Festival de las ideas, cuya programación inspirará a imaginar el mundo. Se realizará entre el 30 de enero y el 1 de febrero de 2019.
-Tendrá como invitados a escritores, músicos, científicos, artistas, entre otros conocedores de diferentes saberes, quienes llegarán a Medellín para deleitar al público con su conversación.
-El contenido para la cita en Medellín está avalado por la participación de autores como Shirin Ebadi, Deirdre McCloskey, Michael Pollan, Leonardo Padura y Laura Restrepo, entre otros.
-Entre los temas a conversar están los distintos tipos de activismo del siglo XXI, la era cuántica, el medio ambiente y el cambio climático, la economía y la literatura.
-Para consultar la programación visite: https://bit.ly/2H5L6Ht.
Hay Festival Jericó
-Se realizará del 25 al 27 de enero, un escenario literario de ideas y de artes con una programación de cine, charlas y música en un entorno natural, con clima ideal para encontrarse y compartir la magia de un pueblo patrimonial de Antioquia.
-La programación incluye figuras de talla internacional como el botánico español Carlos Magdalena y la escritora y periodista chilena Alejandra Costamagna.
-También contará con reconocidos escritores nacionales como Héctor Abad Faciolince, Santiago Gamboa, Juan Gabriel Vásquez, Jorge Orlando Melo, el caricaturista Matador y el periodista Pascual Gaviria.
-Consulte la programación en https://bit.ly/2W1N4ff.