La asociación debe autocriticarse y reflexionar cómo ellos podrían contribuir a ser del país una sociedad más equitativa
La semana anterior el país estaba iniciando la ola de manifestaciones que se avecinan para este año bisiesto, porqué sí, porqué tal vez o por si las moscas hay que salir a las calles, con todo el impacto negativo que tiene para la economía del país.
Pero, la Asociación Nacional de Instituciones Financieras -Anif- muy oronda lanza al ruedo la propuesta de eliminar los intereses a las cesantías y el aporte a las cajas de compensación familiar. No se puede olvidar la fantástica propuesta del gremio del sector financiero de diferenciar el salario para los menores de 25 años.
A agosto de 2019 la utilidad acumulada del sector financiero colombiano fue de $65.200.000.000.000 ($65.2 billones), (El Espectador, 25 de octubre), si lo llevamos a lo que los economistas les gusta tanto, el famoso ingreso per cápita, que para mí es un distractor sobre la realidad de la verdadera distribución del ingreso, la utilidad per cápita del sistema financiero sería de $1’351.057.
A su vez los intereses a las cesantías son del 12% anuales, en términos financieros sería 12% e.a, llevándolo a tasa equivalente mes vencido, las empresas toman prestado de sus colaboradores a una tasa del 0.9489% m.v o del 0.0311% d.v (diario vencido), frente al crédito financiero qué a finales de 2019 entre unas y otras en promedio puede ser del 24% e.a. (1.8088% m.v), es decir el sistema financiero cobra el doble por el crédito a los empresarios del valor de la tasa de interés por concepto de cesantías. ¿En dónde está el verdadero sobrecosto?
Como es sabido, las tasas de interés de captación del sistema financiero para un CDT promediado están en 4.46% ea (equivale al 0.3643% mv) 90 días, en otras palabras, el diferencial entre tener la plata con el empleador y el sector financiero rentando es de 0.5846 puntos porcentuales.
Sustrayendo lo anterior, sí la propuesta de Anif hubiese tenido eco, las utilidades del sector financiero serían un 12% más alto ($73 billones), mientras que los trabajadores tendrían un 4.8% menos de ingresos laborales totales (salario más vacaciones y prima legal).
A ojo de buen cubero, cabría preguntarse realmente dónde está la inequidad en la distribución de la riqueza, si en el sector real de la economía o en el sector financiero.
¿Cuánto empleo se podría generar con la disminución de las tasas de interés de colocación para las empresas? Máxime en una economía en dónde el tejido empresarial está en las micro, pequeñas y medianas empresas, y para ellas el endeudamiento es más costoso que para la gran empresa, por el tema del riesgo financiero.
¿Acaso no sería más viable la generación de empleo con una reducción de las tasas de interés que vía beneficio social de los trabajadores?
Hace algunos años se intentó disminuir el costo laboral eliminando recargos de las horas nocturnas entre las 6 y 10 pm, con el fin de generar más empleo, el impacto fue mínimo.
Anif antes de seguir lanzando reformas para aumentar la inequidad del país, cuando Colombia está entre los más desiguales del planeta tierra, la asociación debe autocriticarse y reflexionar sobre cómo ellos podrían contribuir a hacer del país una sociedad más equitativa. No se puede olvidar que el engendro del 4 por mil nació para tirarle un salvavidas a la banca colombiana en la crisis de fin de siglo. Cómo en el juego de la pirinola en un tiro sale todos ponen (empresarios y sociedad en general) y en el otro turno todo para mi (sector financiero).