Al menos quince civiles murieron este miércoles, la mayoría menores, en un supuesto bombardeo de Rusia contra el pueblo de Ayash, en el oeste de la provincia nororiental siria de Deir al Zur, informaron activistas. 

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos apuntó que los fallecidos son miembros de dos familias y que entre ellos hay un hombre, sus dos esposas y siete de sus hijos menores de edad; así como un matrimonio y sus tres vástagos, también menores, que eran desplazados procedentes de la provincia de Alepo (norte).

La ONG no descartó que el número de fallecidos aumente porque hay heridos graves y desaparecidos. El director de la red de activistas Deir al Zur 24, Omar Abu Leila, confirmó estos datos a Efe por teléfono y agregó que los aviones rusos lanzaron cinco bombardeos contra la población, donde tres viviendas fueron destruidas. 

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Afirmó que tras los ataques aéreos muchos habitantes de Ayash han huido a otras zonas por el temor a nuevos bombardeos. Casi toda la provincia de Deir al Zur está en poder del grupo terrorista Estado Islámico (EI), menos algunos barrios de su capital homónima y el aeropuerto militar. Mientas, en la vecina región de Al Raqa, feudo de los yihadistas en Siria, la coalición internacional liderada por EE.UU. ha aumentado sus bombardeos en las últimas 48 horas.

Los ataques se han concentrado en la ciudad de Al Raqa y en áreas al este de la urbe, tanto en la orilla norte como en la sur del río Éufrates. Según el Observatorio, al menos quince personas han perdido la vida, entre ellas tres menores y cuatro mujeres, en esos bombardeos de los últimos dos días. 

Al Raqa es actualmente blanco de una ofensiva de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza armada encabezada por milicias kurdas, que disponen del apoyo de la coalición y de efectivos de las fuerzas especiales estadounidenses sobre el terreno.