Al menos 17 civiles y 5 milicianos han muerto en los últimos días en la República Centroafricana (RCA) debido a los enfrentamientos armados entre milicias rivales en la localidad de Bria, en el este del país, según un balance provisional ofrecido este sábado por la misión de la ONU.
Los combates entre los antiguos rebeldes de Séléka y la milicia cristiana anti-Balaka han provocado además 36 heridos, y unos 10.000 civiles se han visto obligado a abandonar sus hogares huyendo de la violencia, se lee en un comunicado de la Misión de la ONU en la RCA (Minusca).
El número total de desplazados en esta zona se eleva así a 20.000, 15.000 de los cuales han buscado refugio en los alrededores de la base de la Minusca, que ha reposicionado sus tropas para proteger a los civiles en la región de Haute-Kotto, cuya capital es Bria.
"Los enfrentamientos entre grupos armados en Bria y en cualquier otro lugar de la RCA deben parar", dijo Diane Corner, de la secretaría general de la Minusca.

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Los combates entre milicias cerca de la pista aérea de la localidad de Bria desembocaron el viernes en actos de pillaje en el barrio en el que se encuentran las oficinas de las organizaciones humanitarias y las viviendas de su personal.
Los cascos azules de la Minusca intervinieron para detener el saqueo, y los trabajadores de las organizaciones humanitarias buscaron amparo en la base de los soldados de la ONU.
Estos nuevos episodios de violencia se producen días después de que decenas de personas perdieran la vida en acciones de las milicias en otros dos puntos del sur del país.
Los enfrentamientos y los ataques de estos grupos armados -que han tenido como objetivo también a las tropas de la ONU- han llevado a la Minusca a reforzar sus posiciones en los lugares afectados.