Los "ninis" es un término que ha ganado terreno dentro del panorama Latinoaméricano, para referirse a esa población cada vez más numerosa de jóvenes en diferentes países que ni estudian ni trabajan creando así un limbo de miseria que estanca no solo sus propias vidas sino el desarrollo del país en buena medida. 

En Colombia, unos 582.000 jóvenes entre 15 y 24 años que residen en las trece principales ciudades del país son ninis, según un estudio académico difundido en Bogotá, que advierte que este fenómeno tiene implicaciones sociales y económicas de calado. "La principal causa es que los jóvenes cuestionan el papel de la educación como mecanismo de inserción económica", dijo a Efe Juan Carlos Guataquí, uno de los responsables del estudio de la Universidad del Rosario de Bogotá.

Según el experto, a nivel sociológico, "en una cultura del lucro fácil, el narcotráfico y la corrupción, los ninis no ven que los mecanismos normales de inserción sean los que quieren para su futuro".

La investigación reveló que el 52% de las mujeres ninis realiza tareas del hogar, mientras que solo el 10% de los varones lo hace.  "Los chicos nini no dedican el tiempo a ninguna actividad productiva o importante en términos económicos, mientras que ellas dedican la mayor parte de su día a labores del hogar, cuidar niños, ancianos o discapacitados", precisó Guataquí.

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Ante esta situación, el investigador del Observatorio Laboral de la universidad bogotana advirtió que si una mujer no se educa ni trabaja y además tiene un embarazo temprano, puede entrar en una "trampa de pobreza" que limite su movilidad social. Esta dinámica también puede suponer a la larga "una bomba pensional y demográfica", alertó el profesor. Otro elemento característico de la población nini, que en toda Latinoamérica suma más de 20 millones de personas, según un estudio del Banco Mundial de 2016, es su bajo nivel de formación.

En este sentido, los logros educativos de la población que ni estudia ni trabaja están muy por debajo de los del resto de jóvenes, pues sólo el 19% alcanzó niveles de educación profesional, mientras que para el total de la juventud colombiana la cifra es del 38%.

"En Colombia los ninis son personas de entre 15 y 24 años, de estrato 2 o 3, es decir, de clase media o baja, y que han acabado la educación básica media hasta los 17 años", concluyó Guataquí, quien señaló además que muchos de estos viven en barrios relativamente marginales de ciudades medianas como Cartagena.