“A Jhonny, mi maestro quien me enseñó el misterio del abrazo”.

Bandoneón, estamos de fiesta por una celebración, la Academia de Baile el Candombe, cumple 19 años, y es a su director Jhonny Alexánder Blandón , a quien va dirigida esta nota.

Para conmemorar el acontecimiento, invité unos versos del poema Retrato de Antonio Machado:

“…Converso con el hombre que siempre va conmigo

-quien habla solo espera hablar a Dios un día-;

mi soliloquio es plática con este buen amigo

que me enseñó el secreto de la filantropía. (…)”

Y es que voy a hablar de la filantropía, pero no en abstracto, la voy a personalizar en la artista Dora Ramírez, una mujer que además de haber incursionado en la plástica, deliraba bailando tango. En estas funciones de la danza, conoció a un joven bailarín con las mejores dotes, sentido del ritmo, expresión, una agraciada estampa y evidente carisma.

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Pues bien, Dora proporcionó los medios para que este muchacho, casi adolescente, pudiera desarrollar su talento y para ello impulsó en compañía de sus padres, la fundación de una academia. Se convirtió en su mejor alumna y fue tanta la compenetración, que con el paso de los años, fueron invitados a bailar en Washington, en la sede del BID en 2003.

Cuando se lee la historia del tango en Medellín, aparece como uno de los temas centrales, la novela Aire de tango del escritor antioqueño Manuel Mejía Vallejo, luego la Fundación que lleva el mismo nombre montó el musical Aire de Tango, basado en la obra homónima. En la novela, el protagonista es Jairo, pues bien, este papel fue representado por Jhonny en funciones que colmaron escenarios, como el Festival de Teatro de Bogotá, luego en Europa y otros países de América Latina, además de Medellín.

Pero como el tema central que nos ocupa, es la efemérides de la Academia el Candombe, voy a contar parte de su historia. El perfil es la enseñanza del tango y debido a la demanda de la ciudad, se dan clases de género tropical, flamenco y danzas urbanas.

En largas conversaciones con el protagonista de este artículo, me ha contado la gran influencia que en su hacer artístico han tenido los bailarines de la ciudad y el aprendizaje que de ellos ha logrado, observando la carrera de las distintas academias, grupos y parejas de baile independientes.

Siguiendo con este recorrido, agradece la colaboración del cuerpo de profesores y de su elenco, parte fundamental en su vocación de bailarín y de docente. Exalta sobremanera el apoyo de la familia en todo momento.

Este maestro del tango, cuenta que el mejor patrimonio son sus alumnas y la razón de ser de la academia. Con cada una de ellas tiene un diálogo, disfrutando el presente que les pertenece, pero no olvida a aquellas que ya no estarán y dice que a cada una le dedicaría una frase, a Luz Marina Bedoya, le agradecería la alegría y el empeño en las clases, para Amparo Vargas estaría la memoria de su amable hospitalidad, y a la última alumna que partió, Sonia Camargo, le diría: “Aún me debes el abrazo de despedida”

Ahora bien, además de la docencia, el grupo de baile de El Candombe bajo su dirección, ha realizado montajes de obras como, Un tango por un poema. Homenaje a Evaristo Carriego y Hombre de la de la esquina rosada, un cuento del escritor argentino Jorge Luis Borges, llevado a escena, en una combinación de teatro, danza y canto. Ambos galardonados con la Beca a la Creación de la Alcaldía de Medellín en 2012 y 2017, respectivamente.

Por todo este empeño, las obras han sido representadas en la ciudad, recorriendo la mayoría de los teatros y centros culturales, como también la incursión en otros municipios y ciudades de diferentes departamentos.

Es de todos conocido el amplio espectro del tango, que se irradia a otros países, y es así como en marzo de 1917, el Festival internacional de tango de Granada (España), invitó como show central la obra Un tango por un poema. Homenaje a Evaristo Carriego, recibiendo los mejores elogios por la interpretación, luego pasaron a Torrejón de Ardoz en el mismo país y después el elenco se trasladó a Holanda para presentar obras en pequeño formato.

En este año por el mes de octubre, la ciudad de Melilla (España), en una nueva versión de La cumbre mundial de tango, recibió el elenco, ahora con un trabajo llamado Tango que fuiste y serás, una breve historia del tango.

Y bien, después de estos 19 años de trabajo en la academia, dice Jhonny que si tuviera a Dora en frente suyo, le diría como lo hacía coloquialmente: “María, creo que he cumplido”.

Despido la columna recordando una confidencia que me hiciera alguna vez, “Siempre supe que el tango era mi destino”

Por eso en medio del regocijo por tantos años y tanto arte, mi ofrenda son estos versos:

“¿Quién se lo dijo todo al tango querenciero

Cuya dulzura larga con amor me detuvo

Frente a unos balconcitos de destino modesto

De ese barrio con árboles que ni siquiera es tuyo? (…)”(1)

1. Soneto para un tango en la nochecita. Jorge Luis Borges.