A sanción del alcalde el proyecto para enajenar activos de EPM. El fantasma de la privatización sigue rondando.
Como se esperaba y se había anticipado, mayoritariamente el Concejo de Medellín aprobó autorizar a EPM a enajenar algunos de sus activos, entre ellos sus acciones en ISA, para lograr liquidez y enfrentar la crisis y coyuntura negativa por la contingencia en Hidroituango.
También como se suponía el segundo y definitivo debate en el Cabildo Municipal fue kilométrico, pues se dilató durante once horas, entre las tres de la tarde del lunes y pasadas las dos de la madrugada de este martes.
Al final la iniciativa, apoyada por el Gobierno de Medellín, fue respalda por 16 concejales, mientras que cinco no la apoyaron.
A los votos negativos de las cabildantes María Paulina Aguinaga y Luz María Múnera, y de su colega Héctor Preciado, posición que ya se conocía, se unieron los de Bernardo Alejandro Guerra y Santiago Jaramillo.
La extensa jornada en la plenaria de la corporación siempre giró alrededor del argumento que era una decisión dolorosa, pero responsables con EPM, mientras que los contrarios siempre adujeron el fantasma o el peligro de un proceso de privatización de la empresa y de que había otras alternativas para conseguir liquidez de EPM, como la venta de las empresas que operan en el exterior.
Esta larguísima sesión fue criticada por los oponentes por la lectura de más de 300 folios de la ponencia. En ello se invirtieron seis horas, mientras que las restantes cinco horas, de las once que duró la plenaria, fue dedicada al debate, que al final no cambió en nada la posición de los concejales sobre el proyecto.
El concejal Simón Molina Gómez, coordinador de ponentes, defendió la larga lectura de la ponencia para segundo debate, pues querían que todo se hiciera de cara a la comunidad, para que después no salieran a decir que estaban tapando o manipulando el trámite del proyecto.
Reiteró que la iniciativa busca la enajenación de unas participaciones accionarias de EPM en otras empresas para darle rentabilidad financiera a la compañía, se genere confianza inversionista y se garanticen las transferencias al Municipio para inversión social como motor del desarrollo en el territorio.
“Hoy se deben tomar decisiones responsables en favor de la ciudad, es claro que debemos apoyar la venta de estas acciones porque en caso contrario, la empresa entraría en un nivel muy alto de riesgo que implicaría cobros inmediatos por parte de las acreedoras agravando la crisis de la compañía, aseguró el concejal Ricardo León Yepes Pérez.
El corporado Bernardo Alejandro Guerra Hoyos expresó las razones por las cuales no firmó el informe de ponencia, entre ellas, la ausencia de sectores fundamentales en las reuniones de estudio para lograr presencia significativa de los mismos, mayor información sobre los estudios contratados y la aplicación del polígrafo, y que el Concejo no pierda la autoridad para enajenar las acciones de EPM en el exterior. Sin embargo, expresó que coincide con el documento en la necesidad de buscar alternativas de financiación para responder ante la crisis actual de Hidroituango.
EPM es y seguirá siendo pública, no se enajenarán siete billones de pesos con este proyecto de acuerdo y es necesario apoyar en este momento a la empresa con el propósito de superar esta coyuntura de iliquidez y poder seguir realizando inversión en obras de infraestructura y sociales que beneficien a la comunidad en Medellín y Antioquia, aseveró el concejal John Jaime Moncada Ospina en plenaria.
El gerente de Empresas Públicas de Medellín, Jorge Londoño De La Cuesta afirmó que se continúa y se seguirá trabajando incansablemente por salvar a Hidroituango, basados en la importancia que tiene para la seguridad energética nacional, representando el 17 por ciento para el país, y el hecho de desperdiciar los 9 billones de pesos que se han invertido hasta ahora en la obra.
Comunidad o las barras presentes en el debate solicitaron en todo momento a los concejales no vender el patrimonio de EPM en ISA para defender el patrimonio público y que la empresa continúe siendo de los antioqueños.