Hay ahora un programa nocturno de viernes y sábados, donde escuchábamos antes Las voces del secuestro. Es el Anochecer o Amanecer de unos señores extranjeros,  y reemplazó a las importantes, únicas y necesarias Las voces del secuestro del gran periodista y ex secuestrado, 1994, Herbin Hoyos Medina. Quién en su secuestro oía a sus compañeros preguntar sorprendidos POR QUÉ LA PRENSA NUNCA SE OCUPABA DE ELLOS.

Han dicho que el tal nuevo programa está dirigido por Herbin Hoyos (¿?)  ¡Y todo como si el secuestro se hubiera acabado! Aunque claro, uno creería que sí, puesto que se hizo la paz. Recordé la definición de Paz: Cesación de la guerra. O sea que la paz no existe por sí misma. ¡Hay que recordar que en Grecia se inventó el Deporte para que  las gentes dejaran de pelear!

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Creo el nuevo Programa se llama algo así como Anochecer o Amanecer en América. Y un señor español  decía "le adoro" (¿le adoro que?) Dativo. En lugar del acusativo "Lo adoro" (lo adoro a él).

Además oí que hacían propaganda al Doctor (Docto, del latín: el que sabe) Petro (Pedro en ruso, Piedra en arameo) ¿Será que con algún permiso de la Emisora, ahora de un español, se puede hacer propaganda política, sin advertir que es  “publicidad política pagada”?

Qué, cuál, quién, cuánto, por qué y para qué, son preguntas que hay que responderse. ¿Qué está sucediendo? ¿No son los dueños los responsables de las emisoras? ¿Quiénes pagan a quiénes? ¿Por qué quitaron el programa humano y humanitario  de Las Voces del Secuestro? ¿Para qué, con qué fin lo quitaron? Creo que esa pregunta nos la estamos haciendo bastantes colombianos.

Bien se supo que en Rusia a algún locutor que transmite -o transmitía- los partidos de Balón-pié, no sé si por radio, TV, o por ambas, lo echaron. No sé si también cerraron el lugar donde trabajaba- porque MENCIONÓ el nombre del enemigo político del “presidente” Putin (curioso, no sé si adecuado nombre, creo Püt quiere decir vía, camino).

Una joven muy inteligente y bella, gran amiga, parte de la familia, que ahora vive fuera de Colombia, escribió un extraordinario libro sobre el secuestro de su padre. Sacamos un pequeño resumen:

A él lo sacaron -de su casa- diciendo que lo necesitaban para que llevara un mensaje al gobierno.  Al tiempo llamaron a decir que lo tenían y a pedir un rescate, en dólares... Se reunió una mínima parte de lo pedido, haciendo, claro, grandes esfuerzos. Se arregló cita para el pago y la entrega.

La familia llegó, los secuestradores no llegaron, el secuestrado tampoco. Finalmente dijeron los de la guerrilla (o quienes se llamaban a sí mismos Guerrilla) que era que el señor había muerto. - No dijeron si era que lo habían matado. - ¿Devolvieron el cuerpo? - No queridos lectores, no devolvieron el cuerpo. Y la familia se quedó sin respuestas. Y la esposa sin esposo, comenzó a languidecer de la propia tristeza. Los hijos aún muy jóvenes quedaron sin su maravilloso papá, y los nietos sin su abuelo.

Ver prensa Medellín Julio- Noviembre 1989. Hace 29 años.

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En PanAmPost: Herbin Hoyos comentó que ese, su programa radial, Las Voces del Secuestro, acaso se había convertido en algo incómodo tanto para el Gobierno, como para el proceso de paz con la guerrilla. Manifestó que cuando se había hecho el anuncio del proceso de paz, hubo gran felicidad porque se pensó que se iba a liberar a todos los secuestrados: “La consecuencia lógica, el resultado, de un proceso de paz, es que de inmediato se libere a los rehenes, pero eso no ocurrió”. (@herbinhoyos