Con el auto de inicio de evaluación ambiental emitido este lunes por la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) el trabajo para la Minera de Cobre Quedradona apenas comienza.
El trabajo de más de 14 años, fundamentado en estudios sobre las características sociales, económicas y ambientales de Jericó y que contó con el acompañamiento de 27 consultoras expertas en geología, hidrología, ecología, entre otras especialidades, representa un peldaño más escalado por la compañía de origen sudafricano AngloGold Ashanti en su interés por obtener las licencias para el proyecto de minería de cobre en Quebradona (Jericó, Antioquia).
Y es un peldaño más porque gracias a ello la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) anunció oficialmente el inicio de la evaluación al Estudio de Impacto Ambiental (EIA), el pasado lunes; pero, ¿ahora qué sigue?
El reciente pronunciamiento de la autoridad minera representa el acto administrativo que determinará la viabilidad o no de la iniciativa extractiva. (Ver gráfico).
Para ello, la minera entregó a cabalidad a la Anla la totalidad de requisitos establecidos, incluyendo los documentos anexos, que evidencian que de los lugares que la empresa identificó durante los años de estudios en el territorio, únicamente Nuevo Chaquiro pasó a una fase avanzada de exploración. Esto quiere decir que la compañía no tiene interés en explotar los títulos que hacen parte del Distrito de Manejo Integrado Cuchilla-Jardín-Támesis.
El proceso de evaluación que realizará la Anla tomará el tiempo que la autoridad disponga y a lo largo de este, es probable que la entidad requiera documentación adicional sobre el proyecto.
Aunque, una vez surtido el proceso de evaluación, la viabilidad o no de la licencia ambiental del proyecto será emitida a través de un concepto técnico, el cual se acogerá mediante acto administrativo, que posteriormente es notificado al solicitante. (Ver gráfico).
Diferentes instituciones del Suroeste de Antioquia, entre las que se encuentran la Alcaldía de Támesis, Visión Suroeste y la Mesa Técnica, elevaron solicitud pública a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) para participar como terceros intervinientes en el proceso de evaluación ambiental que adelanta la autoridad sobre el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) presentado por la multinacional sudafricana AngloGold Ashanti, para explotar oro, cobre, plata y molibdeno en Jericó y Támesis.
“Finalmente, AngloGold Ashanti presentó su EIA ante la Anla. Por fortuna, la ley colombiana nos permite acceder a toda la información sobre los impactos ambientales como terceros intervinientes, porque desde nuestro punto de vista, la minería genera grandes impactos y una huella ambiental negativa que pone en riesgo el desarrollo que queremos para este siglo XXI en nuestro territorio, el cual tiene que ver con la sostenibilidad ambiental y social de toda nuestra región en la que tenemos una riqueza muy importante que proteger, y que se encuentra en amenaza. Se ha dicho que la minería es buena para nuestro territorio, pero la realidad muestra que todas las zonas donde se hace minería son las que tienen mayores dificultades ambientales, sociales, de salud y de todo tipo”, sostuvo Juan Martín Vásquez Hincapié, alcalde de Támesis.
De acuerdo con la Anla, “el tercer interviniente es una persona natural o jurídica que se manifiesta por iniciativa propia para ser parte e interviniente en el procedimiento administrativo de un trámite ambiental, sin necesidad de demostrar interés jurídico alguno”.
No obstante, la Anla será la entidad que acepte o rechace el ingreso de entidades e instituciones para ser terceros intervinientes en el análisis sobre el Estudio de Impacto Ambiental del proyecto minero en estos municipios del Suroeste de Antioquia.