Los apodos y los alias pueden estar con el nombre propio o solos
Sobrenombres y apodos
“… reveló este lunes imágenes inéditas del capo Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán durante sus primeros…”.
No les niego que ya de esto habíamos hablado, y con el mismo ejemplo del escurridizo Chapo Guzmán. Me perdonarán, queridos. La norma ortográfica es simple: el artículo (el, la) lleva minúscula y el apodo, sobrenombre, alias o seudónimo mayúscula (y no son lo mismo: se lo explico abajo). Y si, como en este caso, queda escrito entre el nombre y el apellido del personaje, usen comillas.
Las comillas españolas son las angulares (no sé escribirlas con mi teclado, pero saben cuáles son), así que, en teoría, deberíamos usar esas. Pero no: elijan el tipo que prefieran, entre las tres que usa el castellano (el redactor usó las simples, como ven).
Apodo, sobrenombre, alias o seudónimo
No son lo mismo. Los sobrenombres, empiezo por ellos, siempre van al lado del nombre del personaje: Isabel la Católica (noten que no hace falta coma y que el artículo tiene minúscula). Son calificativos. Los apodos y los alias pueden estar con el nombre propio o solos: Chespirito; Luis Alfonso “Bendito” Fajardo; Sandro de América, el Gitano (la coma es tema de otro costal).
Los seudónimos (nombres falsos) son los que usan los artistas en vez del nombre de bautizo. Eliécer Neftalí Reyes Basoalto tenía un seudónimo: Pablo Neruda.