Esto desconcierta a la ciudadanía y manda un pésimo mensaje de que el presidente de la República tiene un jefe.
“Pero necesitamos que Duque enderece porque si Duque no endereza nos va muy mal”. Esta es la contundente frase del senador Álvaro Uribe, “máximo líder y orientador del partido Centro Democrático” –así lo señalan sus estatutos- sobre el balance de los primeros cien días del presidente Iván Duque Márquez, cien días de confusiones, desaciertos e imprecisiones.
En cuanto a las confusiones, desde el alto consejero del Posconflicto hasta la Vicepresidenta, entre otros, no se sabe si por despistados o porque si es así, han confundido al primer mandatario. Esto desconcierta a la ciudadanía y manda un pésimo mensaje de que el presidente de la República tiene un jefe.
Sobre los desaciertos, la reforma política y la reforma a la justicia no abordan temas como la reforma agraria, la mejora de la educación ni la implementación de los acuerdos de paz. Además, el prohibir la dosis mínima, incumplir los puntos de la consulta anticorrupción y disfrazar la reforma tributaria como ley de financiamiento, son unos pocos ejemplos.
Esto repercute en una serie de imprecisiones que afectan el día a día de todos los colombianos. Por ejemplo, el presidente afirmó en su balance que se han capturado 54.323 personas por distintos delitos, donde 14.850 fueron por tráfico, fabricación o porte de estupefacientes. Esto demuestra una falta total de política criminal por parte del Estado, lo que significa un fracaso en la promoción de políticas sociales que busquen atacar esta problemática a fondo. ¿Cómo es posible que diariamente arresten a 543 colombianos?
En cuanto a la reforma tributaria, se aplica perfectamente la frase “confunde y reinarás”, porque primero dicen que no van a gravar con IVA la canasta familiar, pero ahora afirman que el impuesto no va dirigido a la “canasta básica esencial”. Este último, un nuevo término económico ambiguo que no está respaldado por ninguna entidad, creatividad del gobierno en su máxima expresión.
El Nuevo Liberalismo invita al Gobierno a que deje de engañar a los colombianos. Es necesario que las decisiones que se tomen y las políticas que quieren implementar se muestren a la ciudadanía como son. En la era de las redes sociales, la gente tiene la facilidad de informarse y ver qué es cierto y qué no. También hacemos un llamado urgente a que prioricen las verdaderas problemáticas que aquejan a toda la ciudadanía. Es hora de fijar un camino y un primer paso es atender a los estudiantes, son la esperanza del país.