Tras 20 años en la política, Luis Bernardo Vélez Montoya la tiene clara en la prelación que reclama Medellín.

Y esa prioridad en el plan de desarrollo es recuperando lo social, para mejorar la reconciliación en la ciudad, que se consigue resolviendo las causas y no los efectos de los problemas, devolviéndole la política a la gente.

¿Quién es hoy el Luis Bernardo Vélez presidente del Concejo de Medellín, el fajardista-alonsista de principio de siglo, el que apoyó a Aníbal Gaviria, el que estuvo con Federico Gutiérrez o el del acuerdo triunfador con Daniel Quintero?

Nací en la política con Sergio Fajardo y soy fundador de Compromiso Ciudadano, fui concejal en su gobierno, en el de Alonso Salazar y en el de Aníbal Gaviria. Luego me fui para la Secretaría de Inclusión Social tras apoyar a Federico Gutiérrez y ahora regreso al Concejo porque es un espacio muy importante para dar unos grandes debates sobre la ciudad.

La mirada mía de hoy es muy diferente a cuando comencé de concejal y el Cabildo actual tiene la gran responsabilidad de dar unas discusiones mucho más gruesas a las que empezando en la política yo veía.

Hay que generar hoy un debate frente al tema ambiental, sobre el modelo económico, el modelo social que hemos tenido en estos últimos 20 años, la situación de inequidad de la ciudad es un gran tema, como la reconciliación, la seguridad, el de un modelo social que hay que revaluarlo y reconsiderarlo.

Ahora en el Movimiento Independiente, con el alcalde Quintero, creo que el Concejo necesita mucho debate de pensamiento, de argumentos, de discusiones serias.

¿Y cuál es su mirada de este nuevo Concejo?

Veo un concejo renovado, llegaron doce concejales nuevos, incluyéndome a mí que retorno, hay una mezcla que me parece muy ganadora y que se está viendo en los debates, de concejales con experiencia y otros jóvenes que vienen llenos de bríos, de ganas, de renovación de la política y eso es importante.

Ahora, ¿304.000 votos les origina al alcalde Quintero, a usted y al Movimiento Independiente un enorme compromiso con la ciudad?

Aún no se ha acabado de dar una lectura y una interpretación a lo que ocurrió el 27 de octubre de 2019. Falta estudiar mucho ese fenómeno y ¿por qué un fenómeno?, primero porque un movimiento independiente le ganó al uribismo. Y segundo la votación que cuando uno la analiza en los territorios, observa que son territorios que eran cooptados históricamente por los partidos tradicionales, las comunas más pobres votaron por el Movimiento Independiente, o sea, la política volvió a cambiar en Medellín.

Además la lista al Concejo, que era muy diversa y logró dos curules, también fue una ganancia porque no había grandes electores, sólo el caso mío que ya había hecho un ejercicio en la política.

También en una ciudad uribista, de alguna manera conservadora, logra ganar una propuesta independiente, encabeza de una persona que nunca había sido candidato a la Alcaldía y en contra de todos los pronósticos.

¿Es un movimiento político de coyuntura, de corto o largo vuelo?

Hoy no tenemos una estructura, un equipo, fue el escenario favorable a movimientos independientes como los que aparecieron en Medellín en el caso de Daniel Quintero y en el caso mío.

Hoy hay una necesidad clara de movimientos alternativos o independientes y hay todo un futuro, hay una posibilidad inmensa.

¿Pero la ve como una propuesta política a largo plazo?

Todo depende de cómo nos vaya en este gobierno.

¿Para Luis Bernardo Vélez quién es Daniel Quintero, el que ganó las elecciones y es alcalde?

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Es un hombre inteligente, muy creativo, muy innovador, es un hombre que nace en una era y que entiende que la política cambió, es una persona perteneciente a un mundo de la tecnología, de las redes sociales.

Daniel Quintero nace en la política con las redes sociales y a mí me tocó con el volante, en la calle con Fajardo. Es un hombre joven en edad y que representa la nueva política.

Ahora la ciudad. ¿Cuál es el Medellín que les va tocar gobernar?

Medellín es una ciudad maravillosa, con personas que la quieren, que tienen mucha esperanza en ella, en su futuro, que tiene muchas ganas de salir adelante, pero también tiene unos retos inmensos.

Vengo diciendo desde la Secretaría de Inclusión que Medellín tiene unas paradojas que tenemos que avanzar en resolver.

En Medellín ha aumentado la inequidad y uno la ve representada en la diferencia de la calidad de vida en territorios dentro de la misma ciudad.

Es absurdo, vergonzoso y doloroso que haya una inequidad tan grande, el problema de reconciliación en Medellín es muy complejo, me preocupa mucho el tema de migración hacia la ciudad que está en unas circunstancias sociales muy complejas que tenemos que atender.

Cuando Daniel Quintero y yo nos unimos tuvimos una coincidencia que se refleja en un capítulo que lideré en el plan de gobierno que se llama “Recuperemos lo social”, que se tiene que reflejar en el plan de desarrollo y que precisamente corrija la inequidad, que mejore la reconciliación, que disminuya fenómenos que nos tienen muy preocupados y atrapados como la violencia intrafamiliar, la salud mental, el consumo de psicoactivos es terrible, que es para mí el principal problema de la ciudad, porque está originando graves problemas de violencia, de habitantes de calle, problemas mentales, de suicidios, de accidentes de tránsito y de seguridad.

Por eso cuando hago el acuerdo con Daniel Quintero se centra en que la prioridad debe ser lo social.

¿Cuál es para usted el desafío en grandes obras de infraestructura en la ciudad?

Medellín tiene que mojar en movilidad y en ese sentido es un reto avanzar y concluir el tranvía de la 80, lo que es clave.

¿Lo acaba de replantear el alcalde Quintero?

Fue una propuesta de gobierno de Federico Gutiérrez, pero hoy tiene que ser una realidad.

¿Le cree al Gobierno Nacional con los aportes?

Quiero creer que todo va a salir bien, pero también tenemos que pensar en otros metrocables que mejoren las condiciones de la periferia hacia la Cruz, hacia la comuna Oriental y creo muchísimo en un hospital de salud mental y en la cárcel para sindicados.

¿Cómo hacerle frente a las protestas sociales y en ellas a los violentos?

Yo vengo de la escuela de Héctor Abad Gómez de la medicina social y preventiva, mirando las causas de los problemas y no solo intervenir sus efectos.

En ese sentido tenemos que mirar por qué están ocurriendo las movilizaciones y por qué los jóvenes están insatisfechos y la población tiene problemas que la sociedad y el Estado no han podido resolver.

Es mirar más allá de los efectos, las causas que los propician y en el plan de desarrollo planteo que la política vuelva al ser humano y así las cosas van a cambiar.