Según información suministrada por la Secretaría de Educación de Medellín, la construcción del Centro de Innovación del Maestro (Mova) llegó al 100% y falta culminar aspectos de acabados y redes.
No obstante, el proyecto que fue concebido para impartir formación integral a los docentes, con el fin de que su experiencia y conocimiento se vean reflejados en las aulas de clase para lograr una mejor calidad de la educación, debió culminar en 2016, de acuerdo con lo estipulado inicialmente.
Por la tardanza, los educadores esperan que las labores avancen con mayor celeridad, tal como lo manifestó Luis Fernando Ospina, presidente de la Asociación de Institutores de Antioquia (Adida), quien hizo un llamado a la Secretaría de Educación y a la Alcaldía para que “agilicen los procesos y que realmente empiece lo más pronto posible la idea de una escuela del maestro de carácter integral”.
Por otro lado, Ospina resaltó de la iniciativa la intención de proporcionarles a los maestros la posibilidad de crecer, no solamente el aspecto académico sino también en “todo lo que tiene que ver con lúdica y recreación”.

El porqué de la tardanza
María Isabel Gil Ospina, directora técnica de Mova, aseguró que se espera que las instalaciones puedan entregarse a finales de este año para su puesta en funcionamiento.
Aseveró que “el programa se viene cumpliendo de acuerdo a las adiciones y ampliaciones de tiempo” que se han presentado durante la ejecución.
Los motivos de las modificaciones en el cronograma han sido ajustes, rediseños y la ampliación de espacios para mejores ambientes de aprendizaje, lo que le da “un mayor valor agregado a la obra”, indicó.

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La directora aclaró que el proyecto fue aprobado en 2014 y que la construcción inició en 2015. Especificó que con las adiciones implementadas el presupuesto para la obra ha llegado a los 29.000 millones de pesos.
Asimismo, aseguró que hasta el momento en los procesos de construcción “no se han presentado inconvenientes con la estructura o algo parecido”.
Por otra parte, la directora recalcó que en Mova “todas las formaciones que se programan son procesos gratuitos, entonces, en la medida en que el maestro se califica, actualiza sus contenidos, todo esto tiene un reflejo en aula y finalmente se favorece es la calidad de la educación”.

Características
El nuevo espacio, que se ejecuta actualmente en el distrito de la innovación (zona norte) de la ciudad, contará con 8.226 metros cuadrados de área construida y tendrá aulas de formación y espacios experimentales de formación para el cuerpo, lectura, investigación, ciencias de la vida, bricolaje, creación audiovisual y expresiones artísticas.
Además, se contemplan espacios multifuncionales, exteriores y auditorio, que serán áreas de las que también podrán disfrutar los docentes.
La Secretaría de Educación de Medellín comentó que la estrategia ha sido analizada, entre otros, por representantes de entidades provenientes del Municipio de Barrancabermeja, así como la Universidad del Quindío, la sede de posgrados de la Policía Nacional de Bogotá y delegados del Ministerio de Educación de El Salvador, que han arribado a la ciudad para enterarse de primera mano acerca del tema.

Más inversión
Para Omar Arango Jiménez, fiscal del sindicato de Adida, la política de Mova se queda corta debido a que “hasta ahí llega porque el maestro simplemente va allí pero no tiene un apoyo grande y concreto para seguir en su formación profesional”.
Aunque en Medellín se otorgan becas para estudiar maestrías y doctorados “no son suficientes porque no hay la cobertura necesaria para que todos los educadores tengan un proceso formativo”, añadió.
Jiménez hizo un llamado a la Administración Municipal para que este espacio sea puesto al servicio del mayor número de educadores “pero que al mismo tiempo las instituciones educativas y la misma Secretaría de Educación” les brinden a los docentes la posibilidad de utilizar parte de su tiempo laboral para los encuentros que se realicen para las actividades.
En su opinión, debe haber más inversión por parte de la Administración, de lo contrario “son unas falsas expectativas las que se les crean a los educadores, porque si este tipo de estrategias no tienen una inyección presupuestal suficiente, quedan como una simple demagogia”.

Veeduría de los docentes
Para Jhon Jairo Morales, abogado y líder de la Comuna 4, la comunidad esperaba de la ejecución “unos avances más rápidos y significativos. Además, siempre se presentó como fortaleza del proyecto que éste estuviera asentado en una zona de transformación de la ciudad como es el Distrito de la Innovación (Zona Norte de Carabobo).
De igual manera, “hemos considerado que ha faltado por parte de los docentes de la ciudad o las asociaciones que los representan, mayor control y veeduría al proyecto, que si bien sabemos es una obra de ciudad, la misma tiene un enfoque dirigido a sus intereses”, enfatizó.
“La idea inicial del proyecto fue producto de la concertación con los maestros de la cuidad, pero no se dejaron bien viabilizados los recursos que garanticen su finalización en lo que respecta a la parte constructiva y menos aquellos que garanticen su puesta en marcha”, afirmó.