Los móviles y los autores del ataque en contra de los civiles, siguen causando confusión.
El vicepresidente, general (r) Óscar Naranjo, se desplazó este sábado a Tumaco, en cuya zona rural ocurrió un confuso ataque en el que murieron al menos 6 civiles que participaban de una protesta contra la erradicación de cultivos ilegales y que fue atribuido a disidentes de las Farc.
"Hemos regresado a Tumaco para proteger a las comunidades y dar certeza de que los heridos recibirán una buena atención y para garantizar que la Fiscalía establezca los hechos que produjeron 6 muertos y 21 heridos", aseguró Naranjo, según un comunicado difundido por su despacho.
Naranjo, quien permanecerá en ese municipio durante los próximos ocho días, visitó en su primera jornada a los heridos que permanecen en el hospital San Andrés. "El balance es que 6 personas fallecieron en los hechos, permanecen 5 hospitalizados, 10 fueron remitidos para tratamiento especial a Pasto y el resto de los heridos fueron dados de alta durante el día", explicó el funcionario.
Según el Ministerio de Defensa, disidentes de la columna móvil Daniel Aldana de las Farc lanzaron ayer explosivos contra miembros del Ejército y la Policía que escoltaban a erradicadores de matas de coca en un punto llamado Puerto Rico, y contra campesinos reunidos en el lugar para protestar contra esa labor, y luego dispararon contra los presentes. Sin embargo, Marcha Patriótica acusó a la Policía de ser la autora del ataque que, según dijo, dejó 8 muertos y 52 heridos, muchos más que los informados por el Gobierno.
"Nos duele ver a estos campesinos sometidos a las presiones de las mafias y el crimen organizado, ver cómo a pesar de tener un acuerdo para sustituir los cultivos ilícitos y dar un paso adelante, hay organizaciones criminales que se oponen a la sustitución como a la erradicación forzosa de cultivos", afirmó Naranjo.
De acuerdo con el comunicado, la Vicepresidencia "trabajará desde Tumaco para hacerle seguimiento a los distintos mecanismos y compromisos del Gobierno en la región", para lo cual se reunirá con autoridades locales, líderes sociales y defensores de derechos humanos.
De igual forma, revisará los avances de los planes de erradicación y sustitución de cultivos ilícitos en el departamento de Nariño. En abril pasado, cultivadores de coca mantuvieron cautivos durante unas 48 horas a 11 policías en medio de una protesta contra la erradicación de sembrados ilegales en Nariño.
El Gobierno tiene como meta acabar este año con 100.000 hectáreas en las cuales hay cultivos de coca, mediante la erradicación forzosa y la sustitución voluntaria pactada con campesinos en los departamentos más afectados por el conflicto armado.