Las cifras estimadas arrojan al rededor de 22.000 ciudadanos del país vecino en la capital antioqueña, cuyas condiciones varían dependiendo de la naturaleza de su estadía, que puede ser legal o irregular.
Cada vez es más frecuente toparse con ciudadanos venezolanos en Medellín, quienes según usuarios del transporte público, abordan los vehículos para vender dulces. Así mismo, los transeúntes encuentran en diversas esquinas grupos de inmigrantes bolivarianos expendiendo sus tradicionales arepas para financiar su permanencia en Colombia y enviar algo a las familias que dejaron en su nación de origen.
Ante esta situación, un grupo de activistas se ha dado a la tarea de registrar el flujo migratorio con sus impactos, tanto para los medellinenses, como para los mismos foráneos. Una de las inquietudes instaladas actualmente en la capital antioqueña tiene que ver con el número de nativos venezolanos que diariamente buscan acogida en Medellín y de igual manera, con conocer sus condiciones de vida en el presente inmediato.
“Medellín es la sexta ciudad a donde están llegando los venezolanos en Colombia, las primeras son Cúcuta y Maicao obviamente por ser la zona fronteriza, luego están Bogotá y Barranquilla. En el caso de la capital de Antioquia, la cifra de emigrantes está al rededor de 22.000. Es un registro estimado porque todos los días están llegando más personas”, reveló el vicepresidente de la Colonia Venezolana en Colombia, Toni Vitola.
En el departamento de Antioquia se calcula un dato de aproximadamente de 37.000 ciudadanos que dejaron la nación dirigida por Maduro para instalarse en territorio cafetero, según indicó Vitola. En la Ciudad de la Eterna Primavera, precisó, 7.400 personas pudieron tramitar el Permiso Especial de Permanencia (PEP) emitido por la Cancillería colombiana.
“La realidad es que hay miles de venezolanos aquí que no lograron tramitar el PEP y tampoco tienen la nacionalidad colombiana, porque se debe recordar que en Venezuela vivían más tres millones de colombianos, entonces los hijos de ellos diligenciaron la nacionalidad”, dilucidó Vitola, y agregó que otros 6.000 emigrantes del país petrolero no tienen normalizada su estancia en Medellín.
Estas cifras divulgadas por la Colonia Venezolana en Colombia, según su vicepresidente, son fruto de un muestreo que realizó esta organización hace tres meses a través de encuestas. El estudio, aseguró el representante, arrojó como conclusión que el 70% de los emigrantes del vecino país son profesionales.
“En el tema de salud el lineamiento que se está manejando en los hospitales y en las clínicas es que se tienen que atender venezolanos en situación de emergencia. Este punto se le complica a quienes están aquí de manera irregular, porque aquellos que tienen el PEP pueden acceder al régimen contributivo o subsidiado, pero el que está de manera irregular, no”, explicó el Vicepresidente de la Colonia.
De acuerdo con la información entregada por la organización que representa Vitola, en entidades como Metrosalud ya están prestando atención a sus compatriotas y resaltó que la Personería se ha encargado de que a los procedentes de su país no les “vulneren los derechos universales, nos han ayudado cuando no quieren atendernos en hospitales o cuando no quieren inscribir a los niños en las escuelas”.
El vicepresidente señaló que en la actualidad la Secretaría de Educación de la Alcaldía asignó 1.000 cupos para niños venezolanos en las instituciones educativas de la ciudad. “En el tema de formación no están poniendo trabas, simplemente se requiere que el menor tenga un documento de identificación, que el padre tenga el pasaporte, solicitan cuatro fotos y ya los matriculan de manera oficial”.
Frente a los reportes de comportamiento indebidos por parte de emigrantes venezolanos en Medellín, el secretario de Seguridad, Andrés Tobón Villa, dijo que “se ha presentado asentamiento de estas personas en el espacio público para las ventas informales. Es una situación de crisis humanitaria la que afronta el país vecino, y cuando llegan a la ciudad esa falta de oportunidades los obliga a realizar algunos trabajos en la calle”.
“En materia de seguridad también tenemos algunos reportes, aunque no son de carácter sistemático, de personas que llevan esta nacionalidad y han sido encontradas hurtando, no obstante es importante señalar que son casos particulares”, añadió Tobón.
El funcionario aseveró que las estrategias con el propósito de controlar las actividades ilícitas, no sólo por parte de los emigrantes venezolanos, sino de todos los habitantes en general, son amplias. “No se trata de una estrategia en particular para frenar los hurtos cometidos por cierto sector, por el contrario es una estrategia integral para reducir este delito”.
Según la directora de Medellín Cómo Vamos, Piedad Restrepo, el programa todavía no ha realizado una encuesta poblacional que incluya una pregunta que defina si quien contesta es venezolano o no, dado que este tipo de mediciones marcan la guía para conocer las necesidades y el estado actual de los habitantes de la ciudad, la directora consideró que queda el interrogante acerca de los emigrantes del país vecino, y a su vez, manifestó que sería muy probable la inclusión de estos nuevos pobladores en futuras encuestas.
“La situación en Venezuela no parece mejorar, cada vez se complica más. Eso va implicar para el país un reto enorme, no únicamente para las zonas fronterizas, también para las ciudades que están ofreciendo mayor calidad de vida”.
La directora explicó que la migración comienza en las áreas limítrofes pero se desplaza a otros municipios, en el caso de Cúcuta, sus indicadores evidencian baja calidad en aspectos como empleo y acceso a servicios, lo que motivaría un éxodo de estos emigrantes a otros sitios del territorio nacional.
“Es un desafío para las ciudades, no sólo para la encuesta Medellín Cómo Vamos, empezar a establecer cuántas personas vienen del país vecino”, expresó Restrepo, quien además subrayó la importancia de incluir en el futuro inmediato a los procedentes de Venezuela para conocer su estado en materia de derechos humanos, y posteriormente establecer si esto tendría algún impacto en la seguridad. La directora aclaró que finalizando el presente semestre de 2018 los ciudadanos podrían saber si la próxima encuesta del programa incluiría a los emigrantes venezolanos.