Los resultados de AltavozFest del año pasado dejaron muy buena impresión. Este año se pretende mantener y mejorar el festival que se fue construyendo con el proceso de varios meses, para llegar al gran cierre con los convocados y las bandas internacionales.
El beneficio que pueden tener las bandas como medio de lanzamiento a otros festivales y nuevo público lo pueden lograr con una propuesta como Altavoz. Cada banda tiene la oportunidad de decidir cómo realiza su difusión, cómo crece y a qué público objetivo quiere llegar. Para muchas bandas Altavoz ofrece esta alternativa, para otras no, y se respeta cada postura.
“El Festival ha crecido bastante en temas logísticos y técnicos, en la comodidad del público desde su ingreso, zonas de alimentación y sonido para las bandas. El compromiso para mantener Altavoz es altísimo, este año el presupuesto es de 3.300 millones de pesos, que incrementó en un 32% respecto al año anterior” nos comenta el director de Altavoz, Felipe Grajales
El aspecto musical de cada agrupación es fundamental para sentar bases de género y estilo, pero hay otros aspectos relevantes como el manejo de la banda, la proyección con medios, la responsabilidad y disciplina que cada integrante se inculque y hasta su presentación del brochure. Y nos complementa Felipe, “Nos alegra mucho que las bandas se estén profesionalizando, lo que facilita mucho el trabajo. Cada vez las bandas entienden más la convocatoria y envían los documentos con la información requerida, tienen el rider y el backline claro, saben concretar el staff y otros detalles que dan cuenta del avance.”
Existen programas incluyentes alrededor de Altavoz: “La Secretaría de Cultura Ciudadana apoya las bandas locales en programas como Altavoz Lab, que es el ciclo formativo a músicos; los intercambios Altavoz, que se hacen con festivales nacionales e internacionales que garantizan la circulación de las agrupaciones de la convocatoria: Este año se han tenido bandas de Altavoz tocando en la Carpa Intolerancia del Festival Vive Latino y Force Fest ambos de México, Festival Mupa de Panamá, Imesur en Chile, Hip hop y Rock al Parque de Bogotá, Fiura en Cali y Galeras Rock en Pasto. Para los músicos se tiene la Convocatoria de Estímulos para el Arte y la Cultura”, explica Felipe
Y más allá de este proceso y ordenamiento dentro de la banda, un ejercicio que se realice con Altavoz, pasando por todos sus procesos, permite que se desarrolle el aprendizaje de los aspectos que hacen que una banda se forme como empresa, que aquellos vacíos fundamentales de la organización del grupo se perfeccionen y que al final la banda y sus integrantes tengan una capacitación más profesional al terminar total o parcialmente este tipo de procesos; en definitiva, un ejercicio interesante que se complementa con su propio sonido.
Y del aporte de las bandas internacionales nos cuenta Felipe: “Creo que ha sido muy valiosa la presencia de las bandas internacionales en el Festival y que han ayudado, en algunos casos al crecimiento de las bandas locales. Por ejemplo, todas las bandas de cierre de Altavoz están precedidas por agrupaciones de convocatoria, lo que representa un reto, pero también una oportunidad. Creo que la experiencia ha demostrado que en vez de opacar, las bandas internacionales les dan brillo a las locales con el apoyo del público”.
Hay retos para seleccionar el cartel internacional, “Es importante que mucha gente se sienta identificada, pero a la vez el Festival debe ofrecer novedad. Se apuesta por bandas legendarias, pero también por otras agrupaciones que se están abriendo espacios. Siempre se habla con personas de las escenas musicales de Medellín cuando se elabora el cartel” nos concluye el director.