El presidente de Estados Unidos reaccionó a través de su cuenta en Twiter tras conocer las declaraciones del padre de uno de los jóvenes detenidos en China.
El presidente de EE. UU., Donald Trump, criticó este domingo al padre de uno de los tres baloncestistas universitarios estadounidenses liberados este mes en China tras ser detenidos por hurto, y dijo que los debería haber dejado en prisión.
Trump respondió así al padre del joven LiAngelo Ball, LaVAr Ball, quien el pasado viernes restó importancia al papel del mandatario para lograr la liberación de los deportistas. "Ahora que los tres jugadores de baloncesto están fuera de China y a salvo de años de cárcel, LaVar Ball, el padre de LiAngelo, no acepta lo que hice por su hijo y que el hurto no es gran cosa. ¡Debería haberlos dejado en la cárcel!", dijo el presidente en un mensaje divulgado en su cuenta de Twitter.
Trump reclamó el pasado miércoles el mérito por la liberación de tres jugadores que habían sido detenidos en China por hurto, al asegurar que gracias a él evitaron "10 años de cárcel" en el país asiático.
Los tres jugadores de los Bruins, el equipo de baloncesto de la Universidad de California en Los Ángeles (Ucla), llegaron el martes a esa ciudad, casi una semana después de haber sido detenidos y acusados de robar gafas de sol de diseño en una tienda de la ciudad de Hangzhou.
Trump, quien regresó esta semana de una gira de trece días por Asia, visitó Pekín poco después de que los jóvenes estadounidenses fueran detenidos y habló del tema con el presidente chino, Xi Jinping. El caso generó atención mediática en parte porque uno de los afectados es el hermano menor de Lonzo Ball, la nueva estrella de los Ángeles Lakers.
Ball se convirtió el pasado fin de semana en el jugador más joven en la historia de la NBA en conseguir como profesional su primer "triple-doble" (dos dígitos en tres estadísticas de puntos, rebotes, tapones, asistencias o recuperaciones).
Su hermano LiAngelo Ball resultó detenido junto a sus compañeros Jalen Hill y Cody Riley la semana pasada y fueron acusados de robar gafas de sol en una tienda de Louis Vuitton al lado del hotel en el que se alojaban los jugadores, que visitaban China para disputar un partido de una competición regional. La Ucla ha suspendido a los tres baloncestistas de forma indefinida.