El pasado sábado, bombardeos estadounidenses contra un puesto de control acabaron por error con la vida de seis policías afganos e hirieron a otros 14 en la provincia de Helmand, lo que fue confirmado por EE.UU.
Tres civiles afganos murieron después de que supuestamente soldados estadounidenses les dispararon cuando el vehículo blindado en el que viajaban resultó afectado por la explosión de un artefacto en la provincia de Nangarhar informó este lunes una fuente oficial.
El portavoz del gobernador provincial, Attaullah Khogyanai, indicó que el suceso tuvo lugar la noche de este domingo, cuando los militares de EE.UU. dispararon contra los civiles tras la explosión de un artefacto al paso de su vehículo.
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"Los civiles son un hombre y sus dos hijos, que trabajaban en una fábrica cercana", detalló la fuente, que no ofreció información sobre si los militares estadounidenses sufrieron bajas.
La oficina de comunicación de las fuerzas de EE.UU. y la Otan en Afganistán indicaron que, por el momento, no tienen información sobre este incidente.
La violencia en Afganistán se ha intensificado durante los últimos dos años, tras el final de la misión de combate de la Otan, que continúa en el país en misión de asistencia y capacitación de las tropas afganas con 13.000 soldados, de los que EE.UU. tiene previsto mantener a 8.400 militares este año.
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