El ganador del Premio Nobel de Paz en 1987, por su apoyo a los procesos de paz en los conflictos armados de América Central, manifestó su preocupación por la democracia, al ver la tendencia de concentración del poder en varios líderes de los países latinoamericanos.
El expresidente de Costa Rica y Premio Nobel de la Paz Óscar Arias aseguró que la situación política que vive Venezuela debe ser una advertencia para las democracias de la región, ante lo que criticó la concentración de poder en Nicaragua y Bolivia.
"Las democracias no pueden defenderse en retrospectiva. Es en el momento mismo de la amenaza en donde hay que alzar la voz y denunciar, no importa cuán populares o impopulares sean los líderes en el poder. Luego, puede ser demasiado tarde. El caso de Venezuela es, por supuesto, el más urgente y el más desgarrador", aseguró Arias en el diario La Nación.
El Nobel de Paz agregó que "los problemas que revela (la situación de Venezuela) deben ser una advertencia para toda la región".
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El sábado, la Justicia venezolana reversó su controvertida decisión que delimitaba la inmunidad parlamentaria y se arrogaba las atribuciones de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), y anunció que el ente legislativo podrá volver a ejercer sus funciones, aunque solo si pone fin al desacato.
Para Arias, las democracias latinoamericanas no están exentas de "retrocesos", "populismo" y "demagogia"; y deben estar "permanentemente alertas y apostar por los mecanismos que fortalecen el marco institucional".
Asimismo, el expresidente (1986-1990 y 2006-2010) costarricense criticó la concentración del poder en Nicaragua y Bolivia.
"Hace menos de seis meses, Daniel Ortega ganó su tercer mandato consecutivo al frente del Gobierno de Nicaragua, incluyendo sin empacho a su esposa en la papeleta, con el favor del Tribunal Electoral y la descalificación de la oposición en plena contienda", expresó.
"Mis ojos no pueden creer que todo aquello haya desembocado en la pantomima de hoy. No fue para esto que murió Sandino", argumentó Arias en alusión a la revolución sandinista en Nicaragua.
Sobre Bolivia, señaló que el presidente Evo Morales "anunció su intención de perseguir un cuarto mandato consecutivo".
"Hay casos en América Latina que logran la combinación explosiva de un estado débil y atrofiado con la figura de un ejecutivo que concentra el poder y abusa de él", afirmó.
Arias indicó que el futuro democrático de América Latina "no depende solo de elegir a mejores líderes, sino de formar mejores instituciones".
"Instituciones que fomenten el debate crítico y plural; que hagan valer la ley y el bien común sobre los intereses individuales y gremiales; que afirmen el sistema de pesos y contrapeso, que proscriban la injerencia militar en el gobierno civil; que destierren la corrupción y que hagan de la profesión política el mayor honor al que pueden aspirar las personas más capacitadas de la sociedad", apuntó.
Arias también se refirió al Gobierno estadounidense de Donald Trump y la iniciativa para construir un muro en la frontera con México.
El muro "es una inmoralidad, un fallo que denota la miopía y la amnesia de un gobierno empeñado en repetir los más oscuros episodios del pasado", manifestó.