Tras cinco horas de ataques atribuidos al autodenominado estado islámico, quince personas han fallecido en Kabul.
El número de muertos en el ataque suicida contra las instalaciones de una unidad del Ejército afgano en Kabul ha aumentado a quince, entre ellos once soldados y cuatro insurgentes, y el de heridos a 16, informó una fuente oficial.
"Ahora confirmamos que 11 soldados del Ejército han muerto y hay 16 heridos", dijo el portavoz del Ministerio de Defensa afgano, Dawlat Waziri, que culpó del asalto a la red Haqqani, vinculada a los talibanes y que presuntamente tiene su base en Pakistán.
El ataque contra las instalaciones de un batallón del Ejército afgano situado cerca de la Academia Militar Marshal Fahim en el área de Oargha, en el oeste de Kabul, comenzó hacia las 5.00, hora local y se prolongó durante cinco horas.
Dos suicidas murieron al detonar los explosivos que portaban y otros dos fueron abatidos por las fuerzas de seguridad mientras que un quinto fue capturado con vida.
El grupo terrorista estado islámico (ei) asumió la autoría del ataque, sin embargo las autoridades afganas consideran que sólo la red Haqqani de los talibanes pueden perpetrar una acción de estas características.
"El ei no tiene el nivel para llevar a cabo este tipo de ataques, estos ataques están siendo perpetrados por los Haqqani", afirmó Waziri.
Este ataque suicida se produce después de que el pasado sábado un atentado en Kabul con una ambulancia cargada de explosivos causara 103 muertos y más de 200 heridos.
Afganistán atraviesa una de sus etapas más sangrientas tras el final al inicio de 2015 de la misión militar de la Otan, que continúa en el país en tareas de adiestramiento y capacitación de las fuerzas afganas.
Estados Unidos decidió en septiembre del año pasado aumentar su dotación en 3.000 efectivos hasta los 14.000 soldados, mientras que la Otan ha incrementado sus efectivos en una cantidad similar.