La selección Colombia cayó anoche 4-3 ante los anfitriones ecuatorianos, en la segunda fecha del Grupo A del Sudamericano sub-20.
La Tricolor dejó pasar una oportunidad única para conseguir su primer triunfo y de paso treparse al liderato del pentagonal. Porque después de un auspicioso inicio de partido, en el que se fue adelante con las anotaciones de Damir Céter y Jorge Obregón, el equipo inexplicablemente declinó en su rendimiento y terminó sufriendo una dolorosa caída, que dejó más lejana la posibilidad de clasificar al Hexagonal final.
Lo más preocupante son los constantes y groseros errores en la defensa. Y hasta insólitos, como sucedió en el penalti que le cometió el arquero Manuel Gardani Arias a Bryan Cabezas, en una acción en la cual el delantero ecuatoriano se encontraba de espaldas y lejos del arco.
En un abrir y cerrar de ojos, los del vecino país empataron y siguieron de largo en el marcador. Y Colombia, inmersa en un mar de nervios, no reaccionaba. Céter, Obregón y Juan Camilo Hernández, de gran actuación en la primera parte, desaparecieron por completo para la etapa complementaria.
El equipo sintió esa situación y recién tuvo una tenue reacción con el ingreso de Éver Valencia. El creativo de Independiente Medellín anotó el 3-3 en una acción en la cual remató solo, bajo el arco, y la esférica se estrelló contra el vertical pero en el rebote golpeó en su cuerpo y se coló en la valla del arquero José Cevallos. Pero en el descuento, cuando el empate parecía cantado, apareció Jordy Caicedo para conseguir con un certero cabezazo el 4-3 definitivo.
Colombia tendrá descanso mañana y después se medirá ante Brasil y Chile. Dos partidos en los cuales deberá levantar considerablemente el rendimiento para seguir soñando con el Mundial.