Como resultado de un fallo judicial por una Acción Popular de 2010, mañana a las 8:00 a.m. se iniciarán las labores de desalojo y demolición de las viviendas construidas en la finca El Cortado, predio que le pertenece a Medellín y que se considera inestable, informó el alcalde encargado de Bello, Jairo Araque. 
Dicho fallo se produjo en el 2013 y obliga a hacer la evacuación y posterior demolición de  las viviendas, aseveró el mandatario. “El objetivo de esto es salvaguardar la vida de  los habitantes que tenemos en ese sector y, sobre todo, cumplir la Acción Popular pero generando el procedimiento de la manera más acorde, en el cual no vulneremos los derechos de los habitantes de la zona”, indicó. 
Según expresó la secretaria general de Medellín, Verónica de Viveros, este jueves se hará la reubicación de un primer grupo de familias, 176 para ser exactos, pero habrá unas etapas posteriores.
Asimismo, el alcalde (e) resaltó que desde hace un año han estado visitando la comunidad, sensibilizándola y hablándoles sobre el riesgo que presenta la zona y que, efectivamente, tienen que salir de las viviendas, pero a la fecha sólo seis familias lo han hecho de manera voluntaria. Por otra parte, la Administración va a asumir el costo de los subsidios de arrendamiento por tres meses, señaló que ya están listos en la tesorería de Bello para que las personas los reclamen y busquen una nueva vivienda. 
Una de las grandes preocupaciones que manifestó Erika Bedoya, quien vive hace más de seis años en el sector El Cortado o Nueva Jerusalén, del barrio París, zona que será evacuada posteriormente,  es cómo van a ayudar al sostenimiento de estas familias que van a ser desalojadas, qué va a pasar cuando pasen los tres meses de subsidio. 
La Acción Popular, explicó Araque, habla de un término de dos años a partir  de que se haga el desalojo para concertar un plan de soluciones de vivienda para estas personas. Hasta el momento la Administración ha hecho la caracterización y censo de las personas y se han encontrado diferentes puntos que imposibilitan la realización de esto, como personas que ya tienen propiedades en otros sectores de Medellín y Bello, los cuales no podrán ser beneficiarios del subsidio. Igualmente, por intermedio de La Lonja, se viene realizando un censo para determinar cuáles son las condiciones de cada una de las viviendas, con el fin de individualizar a cada familia con sus propiedades. 
La Acción Popular fue interpuesta por la misma comunidad al ver el incremento de la población en este asentamiento, explicó el alcalde (e), quien añadió que, adicionalmente, allí se han presentado situaciones complejas de orden público. Aunque no se tienen bandas identificadas, resaltó Araque que se está trabajando con el Municipio de Medellín y con el Área Metropolitana para construir un CAI Periférico o, en su defecto, una base de Carabineros para llevar control e institucionalidad a la zona.

El proceso
El alcalde encargado de Bello, Jairo Araque, manifestó que no ha sido un proceso fácil realizar la caracterización de estás familias, pues hay algunas que han vendido sus predios y llegan unas nuevas, lo cual los obliga a repetir dicha identificación.  Además, aseguró que se ha dispuesto un equipo interdisciplinario para hacer dicho desalojo, que contará con sicólogos, trabajadores sociales, inspectores de policía y operador logístico, para prestarle apoyo a las familias en sus desplazamientos, con la posibilidad de movilizar los enseres que tienen en ese lugar. “El objetivo es generar el menor traumatismo en las zonas y a las familias pero también entender que es el cumplimiento de una sentencia judicial que no podemos evitar”, enfatizó el mandatario, recordando, además, que es una zona de asentamiento subnormal.