Efraín Antonio Campo Flores y Franqui Francisco Flores de Freitas, sobrinos del presidente de Venezuela Nicolás Maduro, son acusados por una serie de delitos relacionados con el narcotráfico que, según la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York y la Oficina de Libertad Condicional del Departamento de Justicia de los Estados Unidos deben ser castigados con cadena perpetua, según indicaron medios de comunicación internacionales.

De acuerdo a las primeras investigaciones, los dos hombres a cambio de 20 millones de dólares establecieron la planeación para que por vía aérea se transportaran 800 kilogramos de droga de Venezuela a Honduras, que tendrían como destino final Estados Unidos. 

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Ambos purgan cárcel en Nueva York desde 2015, cuando fueron detenidos por la DEA en Haití, y están a la espera de la condena que será proferida entre 12 y 13 de septiembre, de acuerdo con el el calendario procesal de la corte federal de Manhattan. La suma de delitos de ambos, todos relacionados con el narcotráfico, son intentar sobornar a las autoridades, ser jefes de una organización criminal, usar la violencia, obstaculizar la justicia, cometer perjurio e involucrase en la muerte de una persona.