La madera de esta planta, que ya tiene importantes extensiones de cultivo en el departamento del Valle,tiene múltiples aplicaciones, y hasta sus hojas aportan alimento para reses en la ganadería.
Paulownia Tormentosa es la especie asiática que se comienza a producir y comercializar en Colombia, un árbol maderable que crece entre 25 y 30 metros en sus primeros 5 años y que generaría utilidades desde el primer año de su siembra, pero del que aún se desconoce su comportamiento en el trópico.
La Paulownia, que crece en zonas que van desde el nivel del mar hasta los 2.850 metros, se configura como una alternativa de negocio atractiva en el sector de la madera para el 2017, pese a su reciente introducción al país.
Andrés Ardila, fundador de Agropaucol, una compañía que ha investigado y explotado la planta en el país, explica que en Colombia esta especie maderable tiene un buen nicho de negocio: “Para que sea productivo aconsejamos sembrar mínimo una hectárea con los árboles. Si se hace correctamente el riego y se prestan los cuidados requeridos, la siembra de una hectárea puede costar unos $20 millones de pesos. Al cabo de cinco años, sólo la madera generada se puede vender en 130 millones de pesos”, calculó el directivo.
Y es que además de sus utilidades en términos financieros, la planta resulta una aliada clave en asuntos medioambientales ya que sus raíces ayudan a la recuperación de suelos erosionados y contribuyen a la reforestación, siendo de igual manera, una fuente productora de nitrógeno para el medio ambiente.
Desde otro punto de vista, Mauricio Jaramillo, ingeniero forestal, reconoce los altos rendimientos que tiene la especie asiática, especialmente en materia de crecimiento, pero considera que dada su reciente introducción en el país, podría comportarse de manera diferente. “Esta especie está supeditada a climas de cuatro estaciones, y adaptada a ciclos de defoliación, es por ello que sería oportuno hacer seguimiento a las parcelas de ensayo que demuestren por medio de estudios cómo se adapta la especie en los climas colombianos y qué rendimientos generaría”, aclaró el experto sobre la planta de la que considera precipitado emitir un juicio definitivo sobre su aplicación en cultivos a gran escala.
Desde hace dos años se viene sembrando en varios pisos térmicos del país la Paulownia, una especie que aunque requiere más cuidados que ejemplares como el pino o el eucalipto, reportaría utilidades más altas. Cundinamarca, Valle, Nariño, Tolima y Córdoba, son algunos de los departamentos que ya tienen cultivos de esta madera, mientras que Antioquia se consolida como un territorio igualmente propicio para su siembra gracias a su geografía montañosa.
Usos alternativos de la planta
Al año de sembrada la planta produce biomasa para aglomerados y pulpa de papel o, a los 18 meses, se podrían sacar estacones para cercas. Ya para los dos años de edad, el árbol florece y es muy útil en la producción de miel de abejas y jalea real, una actividad que se puede alternar con la producción maderera.
Después del florecimiento, el árbol se vuelve muy atractivo a la vista y su belleza lo convierte en planta ornamental, con muchas aplicaciones en parques y edificios. La madera generada por la Paulownia es también empleada en la fabricación de muebles, botes, cabañas, pisos, instrumentos musicales, puertas y aplicaciones a la construcción en general.
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