El organismo internacional detalló además que desde inicios del paro hace un mes "cerca de 12.000 estudiantes" no pudieron "acceder a las escuelas por estar expuestos a actos violentos".
El paro minero en Remedios y Segovia, que se mantienen desde hace un mes a favor de la minería tradicional, ha limitado el acceso a alimentos y la movilidad de unas 5.500 familias, 200 de ellas indígenas, reveló este lunes la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (Ocha).
"Al menos 5.500 familias (22.000 personas) pertenecientes a comunidades indígenas, afrocolombianos y campesinos de zona rural y urbana presentan restricciones al acceso de alimentos, bienes, servicios, y movilidad como resultado de las confrontaciones entre mineros artesanales (manifestantes) y la fuerza pública", señaló el organismo internacional.
El pasado 21 de julio, habitantes de Remedios y Segovia, que por más 200 años han vivido de extraer oro, convocaron a una movilización pacífica a favor de la minería tradicional, la cual ha degenerado en hechos violentos que dejan al menos tres muertos.
La ONU alertó que "hay información sobre desplazamientos de familias debido a la presión para participar en dichas protestas y también por violaciones a los derechos humanos".
En ese contexto, señaló que esas 22.000 personas necesitan garantizar su seguridad alimentaria "debido al desabastecimiento de alimentos que se presenta por el cierre de comercio y las vías bloqueadas para el acceso a los municipios".
La información advirtió asimismo sobre el cierre de instituciones educativas y cese total del servicio de transporte público.
"A la fecha aproximadamente 3.000 estudiantes de zona rural y urbana de Segovia se encuentran desescolarizados", apuntó la información, e indicó que "desde el 8 de agosto al menos 9.000 estudiantes regresaron a clases".
El organismo internacional detalló que desde inicios del paro y durante 18 días, "cerca de 12.000 estudiantes" no pudieron "acceder a las escuelas por estar expuestos a actos violentos".
De igual forma, la oficina adscrita a la ONU advirtió que las familias "no cuentan con recursos para suplir sus necesidades, ya que sus ingresos son generados por trabajos informales" a los que se dedican muchos de sus habitantes, que son mototaxistas, boleteros, entre otros.
"De mantenerse esta situación, se podría estar configurando una situación de confinamiento, y agravando la respuesta a los sectores ya afectados", subrayó.
Al dar cuenta de la situación de orden público, la Ocha reveló que los disturbios "ya dejan tres personas muertas (entre ellos un menor de edad) y varias personas heridas en zona rural (otra menor menor de edad), como consecuencia de la explosión de un artefacto explosivo en una vivienda".
Igualmente aseguró que se han reportado saqueos de plazas de mercado y carnicerías por parte de encapuchados, dos vehículos incinerados y amenazas contra los mineros que opten por trabajar durante el paro.
"Según información de la Policía de Antioquia, dentro de las manifestaciones hay presencia de actores armados quienes han realizado ataques contra la Fuerza Pública", señaló el informe, extremo que ha sido desmentido por dirigentes de la protesta.