El delantero peruano insistió en su inocencia a su regreso de la sanción impuesta por la Fifa.
El delantero peruano Paolo Guerrero volvió a jugar este domingo con el Flamengo tras cumplir una sanción de seis meses de suspensión por dopaje. En su reaparición, el club Rubro-Negro venció al Internacional por 2-0.
Guerrero comenzó el partido en el banco de suplentes, pero entró al terreno de juego en el minuto 58 del partido jugado en el estadio Maracaná.
El delantero fue ovacionado por los hinchas del Flamengo en un estadio que se llenó para presenciar la vuelta al campo de uno de los grandes ídolos del club, durante la cuarta jornada del Campeonato Brasileño.
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La última vez que el Depredador disputó un partido oficial con el equipo carioca fue el 19 de octubre de 2017, antes de entrar en vigor la sanción impuesta por la Fifa por dopaje.
"Estoy muy emocionado. Un gran público, el Maracaná lleno. Después de seis meses (sin jugar) por una injusticia, llegué hoy y ojalá todo salga bien porque soy inocente, ya lo dije en la audiencia. El fútbol es mi pasión, es mi vida", aseguró Guerrero tras finalizar el encuentro.
Guerrero dio positivo el 5 de octubre pasado por benzoilecgonina, principal metabolito de la cocaína y de la hoja de coca, tras un partido de clasificación mundialista entre Perú y Argentina en Buenos Aires.
La Comisión de Disciplina de la Fifa le castigó con un año de suspensión a partir del 3 de noviembre. En diciembre, Guerrero recurrió a la Comisión de Apelación de la Fifa, que rebajó la sanción de un año a seis meses.
No conforme con la reducción de la sanción, el jugador quiso acudir al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) para solicitarle la total absolución, en una audiencia que se celebró el jueves, el mismo día que terminaban los seis meses de sanción.