Mientras la oposición prepara nuevas protestas, el presidente Nicolás Maduro denuncia ante el Poder Electoral un plan que buscaba impedir los comicios del 30 de julio para elegir la Asamblea Constituyente.
La alianza opositora venezolana Mesa de la Unidad Democrática (MUD) llamó este domingo a tres nuevas protestas contra el Gobierno de Nicolás Maduro, entre ellas un “gran trancazo nacional” el próximo miércoles, dos días después del “trancazo estudiantil” del lunes.
“Lunes: jornada de difusión y organización de artículo 333 y 350 -referidos a la garantía de la Constitución y al desconocimiento del Gobierno- (...) + Trancazo Estudiantil desde el mediodía”, dijo el primer vicepresidente del Parlamento venezolano, el opositor Freddy Guevara, en su cuenta de Twitter, en nombre de la MUD.
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En otro mensaje añadió que el martes se realizará una “movilización por la libertad de expresión” y “en apoyo a los periodistas en su día”, y que además el Parlamento realizará una sesión.
Asimismo, pidió para el miércoles prepararse “para otro Gran Trancazo Nacional”, pues indicó que en esta oportunidad “debe ser el doble de puntos” y tiene previsto una duración de cuatro horas.
Por otro lado, la MUD también publicó un comunicado en el que manifestó su rechazo a las declaraciones hechas el sábado y este domingo por el jefe de Estado venezolano, quien dijo que un golpe de Estado que se planificó esta semana contra su país tenía “la venia y la participación de los jefes políticos de la oposición venezolana”.
“La Mesa de la Unidad Democrática ratifica que el único que le ha dado un golpe de Estado a la Constitución, a las instituciones del país y por ende a la democracia, es Nicolás Maduro”, dijo la alianza.
En ese sentido, la MUD insistió en que su objetivo “es restaurar el hilo constitucional, violentado por este gobierno”.
Ratificó que continuarán con la agenda de movilizaciones “hasta que sea reconocida la Asamblea Nacional, se libere a los presos políticos, se abra un canal de ayuda humanitario, se establezca un cronograma electoral y se desarme a los grupos paramilitares”.
Desde el pasado 1 de abril, Venezuela vive una ola de manifestaciones contra el Gobierno de Maduro, después de que la oposición denunciara la ruptura del orden constitucional tras unas sentencias del Supremo, revertidas parcialmente, en las que el alto tribunal asumía las competencias del Parlamento. Las protestas se recrudecieron con la convocatoria de Maduro a una Asamblea Nacional Constituyente (ACN).
Algunas de las manifestaciones, a favor y en contra del Gobierno, han terminado con hechos de violencia y han dejado un saldo de 75 muertos y más de mil heridos, según datos de la Fiscalía.