Como consecuencia de la crisis en el sector de la salud, el Hospital Pablo Tobón Uribe (Hptu) había anunciado días atrás que estaba forzado a reducir su atención, entre ellas la disminución de las camas en el pasado mes de agosto. Pasaron de ser 527 a 448 camas, es decir, 79 menos. Las 79 camas de hospitalización, 17 de estas de pediatría, dejaron de recibir pacientes por cuenta de la crisis de la salud. Dichas camas, que se encuentran inhabilitadas de manera temporal, atienden a cerca de 5.200 personas en el año.

En vista de la situación, Alejandro Gaviria, ministro de Salud, especificó que otras instituciones como el San Vicente Fundación y la IPS Universitaria vienen realizando esfuerzos ingentes para mejorar su modelo de atención, algo que no hace el Pablo Tobón, que, según el Ministro, espera que el sistema se adapte a sus necesidades, caso contrario al de otras instituciones, que a su modo de ver, sí han hechos ingentes esfuerzos. 

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En 2016, el Hptu reportó ingresos por 374.407 millones de pesos y utilidades por 8.846 millones. En octubre pasado inauguró una nueva torre que tuvo un costo de 210.000 millones de pesos, con lo cual además se llegó a la cifra de las 527 camas hospitalarias.

MinSalud, en algunas encuestas que ha realizado, confirmó que el Hospital Pablo Tobón Uribe cuenta con uno de los servicios de mayor calidad en su servicio, lo cual a su vez desencadena en sus tarifas elevadas.