El opositor no reconoció los resultados de las últimas elecciones presidenciales y optó por juramentarse ante sus seguidores.
El líder de la oposición de Kenia, Raila Odinga, se autoproclamó este martes "presidente del pueblo", tras no reconocer como válidos los resultados de las elecciones en las que fue reelegido el jefe de Estado, Uhuru Kenyatta.
Odinga juró a pesar de que el Fiscal General, Githu Muigai, había alertado de que la investidura puede incurrir en un delito de alta traición, penado con la muerte (aunque el país no ejecuta a ningún preso desde 1987).
De todos modos, su coalición, la Súper Alianza Nacional (Nasa, siglas en inglés), había adelantado que juraría como presidente de la República, algo que finalmente no ocurrió, ya que escogió la fórmula "presidente del pueblo", que no se menciona específicamente en la Constitución.
Junto a él no compareció el número dos de la formación, Kalonzo Musyoka, de quien se esperaba que tomase posesión del cargo de "vicepresidente del pueblo", aunque Odinga aclaró que "luego" pronunciaría su juramento.
"Juro que seré fiel y leal al pueblo y la República de Kenia, que preservaré, protegeré y defenderé la Constitución de Kenia y por ley establecida", proclamó Odinga en una breve aparición ante decenas de miles de personas que llevaban horas esperando en el céntrico parque Uhuru de Nairobi.
Aunque los medios locales especulaban con un fuerte dispositivo policial que impidiera la entrada al recinto, supuestamente cerrado por la autoridad municipal por "trabajos de renovación", finalmente la presencia de las fuerzas de seguridad fue mínima, y el evento transcurrió sin incidentes.
El veterano líder opositor celebró que sus seguidores se reunieran para "decir que ya basta al amaño electoral", y calificó el evento de "un paso para acabar con la autocracia y para establecer una auténtica democracia" en Kenia.
Pese a que Odinga impugnó con éxito la reelección en agosto de 2017 de Kenyatta, boicoteó la repetición de las presidenciales, celebrada en octubre, por lo que el actual jefe de Estado obtuvo más del 98% de los votos y fue investido oficialmente presidente un mes más tarde.