Con una disminución del 18,8% en las ventas de condominios residenciales en Miami, las propiedades industriales y las oficinas reaparecen como un nuevo vehículo de inversión en la región.
La actual depreciación de las monedas de economías emergentes frente al dólar debido al fortalecimiento de la moneda estadounidense, así como la situación actual de las economías latinoamericanas, han producido una fuerte demanda del mercado de oficinas en el Sur de la Florida, por su calidad de activo seguro y de refugio en una moneda que toma cada vez más valor.
Actualmente, según la Asociación de Agentes de Bienes Raíces de Miami, los latinoamericanos continúan posicionándose como los principales compradores internacionales de inmuebles en el Sur de la Florida con más del 50% de las adquisiciones. Venezuela es el país con mayores compradores de bienes de este tipo, seguido por países como Colombia y Chile.
En los últimos años, el mercado de inmuebles comerciales en Miami se ha expandido de forma creciente y acelerada, y según el último informe de Cbre, compañía líder en inversión y administración de bienes raíces comerciales en Estados Unidos, el total de inversión en oficinas en Miami en el cuarto trimestre de 2016 ascendió a US$700 millones, más del doble del volumen de ventas del tercer trimestre.
Según Camilo López, socio gerente de la firma de bienes raíces y de inversiones TSG, “factores como la incertidumbre en la economía global y la búsqueda de refugio patrimonial en economías sólidas en materia jurídica y fiscal marcarán la tendencia a que los latinoamericanos sean más cautelosos al momento de decidir en qué invertir”. Asimismo, agregó López que la gran resistencia de los bienes comerciales han hecho de los locales comerciales un mercado muy atractivo.
Los mercados de edificios de oficinas se caracterizarán por altas tasas de demanda ante la escasa construcción de nuevos inmuebles de este tipo; según Cbre, los proyectos actualmente en construcción tan sólo aumentarán el inventario actual en menos del 2% en 2017. De igual manera, se espera que las estructuras de arrendamiento a largo plazo que operan para este tipo de inmuebles, entre cinco y diez años, permitan atraer aún más el interés de los inversionistas gracias a su mayor resistencia a los cambios económicos.
Lea más sobre las expectativas del sector inmobiliario en Antioquia para 2017
“Durante el cuarto trimestre de 2016 la disponibilidad de espacio para alquiler se redujo al 11,6% y para 2017 se espera que caiga a la tasa más baja desde 2009. Este año habrá mayor demanda que oferta en el sector comercial y de oficinas en el Sur de la Florida, por lo que los inquilinos deberán pagar rentas más elevadas por los espacios. Ello, sin duda representa mayores ingresos para los propietarios”, añadió López.
En el caso del Sur de la Florida, la región se ubicará nuevamente como uno de los mejores destinos de inversión para productos clase A, con mayores rendimientos que Nueva York y otros mercados con alta rentabilidad. Además, a sus reconocidos atributos turísticos, se sumará el desarrollo de infraestructura de negocios, atrayendo a compañías con deseos de abrir nuevas sedes y con necesidad de adquirir espacios de oficinas.
Dentro de los principales tipos de espacios comerciales que se identifican como los de mayor interés por parte de los inversionistas, se destacan los edificios industriales, los espacios de venta minorista y las oficinas clase A en grandes centros de negocios; estos últimos con características específicas que incluyen aspectos de ubicación, comodidad, diseño y avances tecnológicos.
Según Cbre, Coral Gables sigue siendo una de las áreas de inversión más atractivas para los compradores con US$868,9 millones en ventas desde 2012. Debido a su potencial de crecimiento a largo plazo, principalmente.
Uno de los ejemplos de proyectos inmobiliarios destacados en este sector comercial es Ofizzina, una construcción de 16 pisos iniciada en el 1200 del boulevard Ponce de León. El proyecto cuenta con 331 plazas de aparcamiento, un rooftop privado, un gimnasio, seguridad de última tecnología y casi medio centenar de centros de primer nivel que ya están reservadas por oficinas de gestión del patrimonio familiar y fondos privados, entre otros. Sobre esto el gerente de TSG afirmó que “la oferta de espacios comerciales clase A en grandes centros de negocios es limitada, razón por la cual tan pronto se anuncia el desarrollo de un proyecto, empresas de diferentes sectores presentan sus intenciones por adquirir los inmuebles”.
Con la tasa de vacancia en oficinas descendiendo en el Sur de la Florida y la relativa escasa construcción de nuevos edificios, se espera que el mercado siga ganando valor y atrayendo el interés de los inversores.
Tras la estrella de Belén, rescatando la tradición del pesebre