A no ser que; al no ser, a pesar de su similitud gráfica, encierran significados diferentes y por ello no es apropiado confundirlas ni emplearlas indistintamente.
A. #MeToo
Con el símbolo del numeral y escrito en una sola palabra y con posibilidad de respetar la mayúscula intermedia, es la grafía adecuada para recoger en los textos esta etiqueta de Twitter.
En los medios de comunicación, cada vez es más frecuente ver citadas etiquetas (o hashtags, en inglés) de redes sociales como Twitter. Para evitar la disparidad de grafías con las que suelen recogerse, veamos unas claves o recomendaciones autorizadas (RAE):
1. Numeral o almohadilla #
En varias redes sociales, las etiquetas van precedidas por el símbolo del numeral o almohadilla (#). Este símbolo, imprescindible para el correcto funcionamiento de la etiqueta en las redes, puede emplearse sin temor en un texto corrido para referirse o aludir a la etiqueta. Lo adecuado es escribirlo pegado a las palabras que la forman: #MeToo, y no: # MeToo.
2. Separación entre palabras
Los términos que forman una etiqueta en las redes sociales han de escribirse necesariamente juntos: si #MeToo se escribiera en dos palabras, solamente el término pegado al numeral sería interpretado por los sistemas, como una etiqueta. Por este motivo, a la hora de aludir a una etiqueta en un texto corrido fuera del ámbito de la redes, lo adecuado es mantener juntas las voces que la forman. Si se empleara #Me Too en lugar de: #MeToo, se estaría desvirtuando su forma, o haciendo referencia a una etiqueta distinta.
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3. Mayúscula demarcativa
Cuando una etiqueta está compuesta por varias palabras, en las redes es práctica habitual emplear mayúsculas intermedias, de modo que las letras iniciales de las palabras que quedan pegadas, se escriben con mayúscula (#MeToo, en lugar de: #Metoo). Este tipo de mayúsculas, conocidas en inglés como camel case (caja camello en español), hacen que, especialmente, cuando la etiqueta es larga, sea más fácil de leer. Al no existir la habitual separación entre las palabras, la mayúscula tiene aquí una función demarcativa: ayuda a visualizarlas como las unidades independientes que ellas son. La Ortografía académica, que ya recoge como válidos otros casos como: iPod, eDreams, iBanesto, no impide esta práctica.
4. Tildes
Cuando alguna de las palabras que forman la etiqueta lleva tilde, lo adecuado es escribirla. Nada en el funcionamiento de las redes sociales impide escribir los términos con las tildes que les correspondan; no hacerlo constituye una falta de ortografía que es recomendable evitar. Mejor: #acentúate, que: #acentuate.
5. Comillas y cursiva
No hay necesidad de resaltar con comillas ni cursiva una etiqueta al citarla en un texto. El símbolo del numeral que la encabeza, actúa ya como una marca o distintivo, que es cada vez más reconocida en los medios y en los hablantes en general.
Así, frases como “Trump revitaliza el movimiento ‘Me too’ contra el acoso sexual”. “La actriz habló del movimiento #Me too y reveló que sufrió acoso por parte de un productor”, estarían correctamente escritas, así: “Trump revitaliza el movimiento #MeToo contra el acoso sexual”. “La actriz habló del movimiento #MeToo y reveló que sufrió acoso por parte de un productor”.
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6. Bitcóin - bitcoines
(Plural: bitcoines en lugar de: bitcoins).
Bitcóin, con tilde, es la adaptación al español de bitcoin, nombre de esta moneda electrónica.
Con motivo de la aparición de esta criptomoneda o moneda electrónica surgieron frases como: “La locura del bitcoin: la divisa virtual alcanza los 16 000 dólares”. “¿Son de fiar los bitcoins?”.
En español, (conceptúa la RAE) este término inglés se adapta adecuadamente como: bitcóin (con tilde); su plural: bitcoines.
En singular, se escribe con tilde, por ser voz aguda acabada en ene, y con minúscula y sin ningún resalte tipográfico, al igual que las monedas: dólar, franco, yen.
Las frases anteriores debieron escribirse correctamente así: “La locura del bitcóin: la divisa virtual….”. “¿Son de fiar los bitcoines?”.
B. A no ser que…
Las expresiones: a no ser que; al no ser, a pesar de su similitud gráfica, encierran significados diferentes y por ello no es apropiado confundirlas ni emplearlas indistintamente.
Sin embargo, en los medios es habitual encontrar oraciones que resultan de la mezcla de ambas: “No suele saltar la alarma al no ser que ella se encuentre en un estado de delgadez extrema”. Gente que jamás osaría tocarla al no ser que sea alguien muy cercano a la familia”. “No apoyaremos la investidura al no ser que el partido acepte nuestro programa”.
De acuerdo con la Nueva gramática de la lengua española, a no ser que es una locución condicional equivalente a: a menos que, y va seguida de una forma verbal subjuntiva, como: “A no ser que tengas unos recursos económicos muy fuertes”.
En cambio, al no ser, es una construcción que expresa una causa, por ejemplo: “Censuran las declaraciones al no ser un acto específicamente político”, que se puede sustituir por: “Censuran las declaraciones por no ser un acto específicamente político”.
Por lo tanto, (o por tanto) en los ejemplos iniciales habría sido preferible escribir: “No suele saltar la alarma, a no ser que ella se encuentre en un estado de delgadez extrema”. “Gente que jamás osaría tocarla, a no ser alguien muy cercano a la familia”. “No apoyaremos la investidura, a no ser que el partido acepte nuestro programa”.